“Comenzamos una nueva Semana Santa aunque no podamos manifestar nuestra fe de manera pública, pero hay que tener claro que la Semana Santa se sigue  celebrando  pese a la crisis sanitaria”, manifiesta el presidente del Consejo de Hermandades de Chiclana Antonio González, quien añade que “son momentos propicios para que el cristiano reflexione sobre lo que tiene valor y lo que no lo tiene”.

González comprende que son momentos complicados para todo el mundo, “pero hay otras muchas personas que lo tienen más difícil por su situación laboral y la posterior crisis económica que vendrá cuando todo esto pase”.

El presidente del Consejo señaló que la decisión de aplazar la Semana Mayor de Chiclana no fue nada fácil “todos los hermanos de las distintas cofradías de la ciudad comprendieron muy bien la situación. Es más fuimos los primeros de los municipios de la Bahía en suspender la Semana Santa”, expresó.

Para González hay que extraer algo positivo de esta situación que nos ha tocado vivir. “De todo esto hay que sacar que somos mejores personas . Ahora tenemos que arrimar todos el hombro. La mejor Estación de Penitencia ahora es ayudar al prójimo”.

González incide en las numerosas personas que están sufriendo o que se han visto perjudicadas con la pandemia y con la anulación de la Semana Santa, desde las floristerías hasta los hosteleros quienes esperaban estas fechas para sacar adelante sus negocios.

Así, elogió la buena disposición de cofrades con la venta de papeletas y otras iniciativas con vistas a respaldar a Cáritas en sus parroquias. “Todo con la idea de ayudar a los más necesitados”, resaltó. El presidente del Consejo concluyó con que “son momentos de reflexión y hay que vivir la fe cristiana desde la intimidad”.