Ya son 15 años los que Manolita Fernández reparte panecillos entre los devotos a San Antonio de Padua, un acto de fe con el que pretende inculcar solidaridad, fraternidad y, sobre todo, esperanza para todos los que se encuentran necesitados de ayuda.

"Soy fiel a San Antonio desde que tengo uso de razón", explica esta mujer con el claro convencimiento de que este Santo intercede por los que piden y, asegura, que los deseos son concedidos si de verdad es para una necesidad.

Este próximo lunes, festividades de San Antonio, distribuirá entre los feligreses un total de 3.000 panecillos al final de la misa que se celebrará en la parroquia de la Santísima Trinidad San Telmo a partir de las once de la mañana, una ceremonia religiosa en la que intervendrá 'El coro de la Familia', dirigido por el padre Florencio.

Manolita recuerda que fueron 400 piezas de pan las que repartió por primera vez hace tres lustros y que sucesivamente ha ido aumentando la cantidad de panes conforme pasaban los años.

"Los panecillos valen para todos, pero sobre todo a los enfermos y los niños. Que coman un trozo y que el resto se guarde en la mesita de noche. Es difícil que se estropee, yo misma tengo un trozo de hace 15 años; pero en el caso de que se 'pique' debe mojarse y dárselo a los pajaritos". Con esta fórmula, Manolita afirma que San Antonio ampara a esas personas. Señala que los panecillos también son muy útiles para localizar objetos perdidos como las llaves o cualquier otra utensilio que se haya extraviado en la casa. Cada porción de pan lleva un envoltorio con la figura de San Antonio y una oración. "Si, además, se reza un Padre Nuestro, seguro que aparece".

La fe de Manolita Fernández surge desde pequeña cuando vivía cerca de la iglesia Mayor y más tarde cuando se apuntó a la revista 'La Voz de San Antonio', publicación sevillana con la que colabora desde hace largos años. Pero la verdadera fidelidad al Santo, asegura, se produjo cuando se cumplió su sueño de cantar saetas al Santo Cristo de la Salud, a María Santísima de Gran Dolor y al 'Cachorro' en el Círculo Mercantil de Sevilla. Desde entonces se reafirmó más su fe, algo que quiere contagiar a los demás.