El camino, casi agónico, que desde hace años viene recorriendo el proyecto de construcción del nuevo centro de salud de la costa se encuentra a punto de salvar un nuevo e inesperado obstáculo.

Se trata de la aprobación, por parte de los técnicos de la Gerencia Municipal de Urbanismo, de la modificación del proyecto de las obras de dicha instalación sanitaria, documento en el que se plasma todo lo relativo a la creación de los viarios y su reorganización para la habilitación de una zona de aparcamiento, algo que, inexplicablemente, no recogía el documento original. De este modo, las previsiones municipales apuntan a que será a partir del mes que viene cuando la empresa adjudicataria de las obras, Elsan Pacsa SA, proceda a culminar las tareas de urbanización de la zona, toda vez que las relativas al centro se encuentran finalizadas.

Asimismo, se procederá a habilitar un centro de transformación.

"Afortunadamente", precisó José Pedro Butrón, "ya hemos logrado solventar un problema de gran relevancia, que impedía que el nuevo centro pudiese comenzar a prestar sus servicios a los usuarios en las mejores condiciones".

"No hay que olvidar", añadió, "que en el proyecto original, ejecutado por el anterior equipo de gobierno, no se contemplaba el viario de acceso y, lo que es más grave, tampoco se contaba con el suelo necesario para la construcción del mismo". "Esto", añadió, "nos ha obligado a tenernos que emplear a fondo para, primero, lograr un suelo que no estaba en dicha unidad de ejecución y, además, hemos tenido que modificar el proyecto para que el nuevo viario corrija el fallo de cota del centro, que se encontraba más abajo y, por tanto, era susceptible de sufrir inundaciones".

La necesidad de introducir todos estos cambios en el proyecto original ha supuesto un lógico incremento de los costes de construcción del mismo, por lo que el Ayuntamiento, que en principio los asumirá, va a intentar que la Junta de Andalucía también se haga responsable de parte de este aumento de presupuesto.

De lo que no cabe la más mínima duda, para desgracia de los usuarios y de los profesionales de los únicos centros de salud existentes, es que no se van a cumplir ni las previsiones menos optimistas de la Consejería.