El parking subterráneo de la Plaza Mayor sigue acumulando retrasos en su apertura al público, una situación insostenible para la empresa adjudicataria debido a las pérdidas que, según sus responsables, están acumulando.

Así lo ha puesto de manifiesto el director de Comunicación de la UTE Airesur-McPuar SA, encargada del proyecto, Luis León, el cual ha lamentado en este sentido que "no es de recibo que una instalación como este aparcamiento subterráneo, que podría estar funcionando desde el pasado mes de junio, siga sin poder prestar servicio a los ciudadanos debido al actual clima político que se vive en la ciudad".

Desde dicha firma se muestra su contrariedad por el hecho de seguir a la espera sin poder dar continuidad al proyecto, "una coyuntura que nos está provocando importantes pérdidas, ya que las instalaciones del parking se encuentran totalmente equipadas y con las contrataciones necesarias para su funcionamiento realizadas desde el pasado mes de junio", aseguran.

Asimismo, el representante de Airesur-MCPuar SA hace hincapié en que "nos es totalmente indiferente el color político de la Administración actual, lo que nos resulta insostenible es la paralización de un proyecto por unos u otros motivos que se une a la grave crisis empresarial existente en la actualidad y que en estos momentos está provocando pérdidas para la empresa por valor de casi 200.000 euros".

Cabe recordar en este sentido que, si bien a principios de año se anunció la apertura del estacionamiento tras el verano, posteriormente se apuntó la posibilidad de adelantar dicha fecha debido a la buena marcha de las obras.

Problemas con el tonelaje que pueden soportar los viales de la zona motivaron posteriormente nuevos retrasos, una situación que se ha prolongado durante semanas, si bien a principios del mes de julio la empresa adjudicataria y el Consistorio coincidieron en la intención de que dicho equipamiento pudiera abrir sus puertas durante el pasado mes de agosto.

Pese a ello, los retrasos siguen acumulándose en torno a un proyecto que, como otros tantos, ha sufrido durante su construcción el difícil trámite de un cambio de gobierno municipal, con todo lo que ello ha supuesto tanto para su planteamiento y desarrollo, como para el resto de iniciativas relacionadas y para el entorno.

En relación con las características técnicas del estacionamiento objeto de la polémica, cabe recordar que dicho aparcamiento cuenta con capacidad para albergar unas 350 plazas, de las que 70 se destinarían a residentes de la zona y el resto a régimen de rotación. El parking se ha construido con una superficie total de 9.000 metros cuadrados repartidos en dos plantas.