a del Viernes Santo fue una de las jornadas más emotivas de la presente Semana Santa, ya que las dos hermandades que procesionaron en este día acumulaban varios años de salidas frustradas, suspensión de desfiles y otros problemas, que hicieron del presente año un hito especialmente valorable para retomar la normalidad en dichas corporaciones.

Aunque por motivos muy diferentes, La Soledad y el Santo Cristo vivieron el pasado año un Viernes Santo especialmente amargo, ya que la primera de ellas tuvo que suspender su desfile poco después de iniciarlo debido a una fuerte tromba de agua, mientras que el Santo Cristo se vio obligado a anular la salida ya que la cofradía se encontraba intervenida por el Obispado y dirigida por una gestora provisional.

Estas circunstancias hicieron que los desfiles procesionales de este año cobraran aún más importancia para los hermanos de ambas cofradías, los cuales disfrutaron especialmente de ver cumplidos de nuevo sus sueños de compartir la tarde noche del Viernes Santo con miles de devotos y simpatizantes.

Y aunque por momentos el riesgo de precipitaciones estuvo presente, llegando incluso a caer algunas tímidas gotas, esto no fue obstáculo para que ambas hermandades completaran sendas estaciones de penitencia, arropadas por un numeroso público a su paso por las diferentes calles del centro.

Por su parte, Vera Cruz aprovechó su vuelta a la normalidad para incorporar algunos cambios en su cortejo, como fue la escolta por cuatro cirios a la Cruz de Guía, como hermandad que exalta dicho símbolo; la retirada de los guantes en los penitentes, como hermandad de luto, y el cambio de la agrupación musical por una banda de cornetas y tambores, más sobria y tradicional para este tipo de pasos de misterio. Asimismo, la Virgen del Mayor Dolor volvió a lucir sus manos unidas durante el desfile, retirándose además del misterio la imagen del soldado romano que había procesionado en alguna ocasión.

Asimismo, la hermandad de La Soledad consiguió completar ayer su desfile, después de dos años sin salir a causa de la lluvia y un tercero, el pasado 2013, con la interrupción del desfile poco después de la salida por este mismo motivo.

Especialmente emotiva fue también ayer la salida de esta hermandad para su hermano mayor, Antonio Benítez, pregonero de la actual Semana Santa y al que tan mal sabor de boca dejó el pasado año la decisión de tomar la salida.

Por otra parte, cabe destacar también que en la mañana del Viernes Santo los cofrades de Oración en el Huerto, hermandad que sigue sin poder procesionar por falta de recursos económicos, no pudieron realizar la estación de penitencia en la Iglesia Mayor, como tenían previsto, al celebrarse a la hora prevista un entierro en dicho templo.