La concejala del PSOE, Cándida Verdier, denunció "los recortes que han llevado a cabo desde el Gobierno de Marín en materia de limpieza de los módulos de aseos públicos de la playa de La Barrosa". Al respecto manifestó que "estamos en plena temporada alta turística y este Ayuntamiento tiene la obligación de presentar una playa limpia, con una arena decente y un servicio de calidad", añadiendo que "sin embargo, estamos presentando una playa sucia, llena de piedras y falta de arena y, por si fuera poco, con unos recortes en la limpieza de los módulos de aseos públicos, que presentan un aspecto deprimente en materia de higiene".

Verdier aseguró que "los módulos existentes, sobre todo, en el paseo marítimo siempre han estado asistidos por 18 personas encargadas de su limpieza, dando una imagen de higiene y limpieza. Pero resulta que el alcalde ha recortado la asistencia de las limpiadoras, por lo que se reduce a solo seis personas de lunes a viernes, de forma que una sola persona tendrá que realizar ahora el trabajo que antes hacía tres", afirmó la edil, quien añadió que "solo se mantienen a esas 18 personas durante las jornadas de sábado y domingo". 

De esta forma, dijo que las seis personas encargadas de la limpieza de los aseos públicos de la playa de lunes a viernes "tendrán que desplazarse de un módulo a otro para poder realizar sus tareas, en vez de permanecer en cada uno de ellos, lo que realmente garantiza la limpieza y buen uso de estos módulos. Es la misma situación que sucedió durante los meses de mayo y junio con el servicio de socorrismo, que se limitaba solo a los fines de semana", explicó Verdier, quien ha reprochado al alcalde que, "mientras tanto, sale en prensa diciendo que todos los servicios funcionan al cien por cien".

Por otro lado, la concejala socialista también ha criticado la "lamentable imagen" que presenta el paseo marítimo, en el tramo comprendido entre la bandera azul y el puesto central de la Cruz Roja, sobre todo, en horario nocturno. "Nos encontramos con un paseo marítimo dividido, puesto que de la bandera azul a la primera pista tiene sus actividades normales o, al menos, lo intentan tener los negocios de la zona. Sin embargo, de la bandera azul a la segunda pista nos encontramos un paseo marítimo desierto, tras desalojarse el chiringuito Zurga, permanecer aún cerrado el que era Los Bolos y finalmente también estar cerrado el puesto central de la Cruz Roja".

"Por tanto -añade- desde la bandera azul hacia la segunda pista nos encontramos un paseo marítimo totalmente desierto por la noche, puesto que no hay negocios ni nada que ver", declaró Verdier, quien insistió en que, "si de día se está dando una imagen de playa sucia y llena de piedras, por la noche damos una imagen de medio paseo marítimo vacío". 

Por ello, indicó que "el alcalde, en vez de izas banderas o visitar instalaciones abiertas desde 2007 como hizo hace un par de días, debe preocuparse en plena temporada estival de tener unos servicios dignos, tanto para los chiclaneros como para los turistas que visitan la ciudad".