Disparos al aire y el desfile de un mini ejército, compuesto por una veintena de soldados franceses, escenificaron ayer por las calles del centro la invasión de Chiclana por parte de las tropas galas hace 200 años. El destacamento francés cruzó el Puente Chico sobre las doce del mediodía precedido de un grupo de mujeres vestidas de piconeras. Armados con escopetas de la época, 'los invasores' realizaron varias andanadas de pólvora apuntando al cielo, provocando un gran estruendo. Esta representación llamó la atención de muchas personas que paseaban por el centro de la localidad, ajenos a que con este acontecimiento se festejaba la conmemoración de la Batalla de Chiclana. Y es que, un 7 de febrero de 1810 entraron las huestes napoleónicas en la localidad donde se asentaron durante 30 meses, hasta agosto de 1812.

La escenificación de la invasión de Chiclana corrió a cargo de la Asociación de Amigos del Museo Histórico Militar de Valencia, cuyos miembros portaban indumentaria de la infantería francesa de principios del siglo XIX. El acto central de la irrupción del ejército galo en Chiclana se llevó a cabo en la Plaza Mayor, justo enfrente de la Iglesia Mayor donde un grupo de hombres y mujeres ataviados con ropas de la época protagonizaron la resistencia a la ocupación. Incluso hubo un simulacro de fusilamiento de vecinos de la localidad, que fueron 'víctimas' del asedio francés. Los soldados eran recibidos por la población de Chiclana con gritos de "fuera, fuera", mostrando así su rechazo al asalto de las tropas de Napoleón.

Este montaje es sólo una avanzadilla de los actos que habrán en adelante con motivo de la Batalla de Chiclana para recordar este episodio histórico de la ciudad, una iniciativa que ayer también valió para atraer público al mercadillo con exornos de la etapa de la Guerra de la Independencia instalado en la Plaza Mayor.