El Festival Internacional de Música Étnica de Chiclana (FIMEC) se verá este año obligado a "pedir limosna" para asegurar su supervivencia. Así lo anunció ayer el director de este evento cultural, musical y de ocio, Andrea Morpurgo, tras denunciar un recorte del 40% en la partida presupuestaria que en los últimos años venían recibiendo del Ayuntamiento , de su Delegación de Cultura.

"Si ya en los últimos cinco años ha resultado un ejercicio de auténtico malabarismo mantener y mejorar la calidad del programa ofertado, causando auténtica sorpresa y admiración a nivel andaluz y nacional, incluido el propio Ministerio de Cultura; ahora, con 30.000 euros, no nos queda otra que mendigar limosna para garantizar la supervivencia digna de un evento que, año tras año, ha venido sembrando la ciudad de música, cultura y ocio". "Una actividad", resaltó Morpurgo, "que, aunque no lo vean o no lo quieran ver, ha generado riqueza, ingresos y empleo, además de atractivo turístico para una localidad que, según parece, sólo va a poder vender en ferias como la de Berlín sol, playa y un centro urbano cuyo principal y único atractivo son unas calles plagadas de sucursales bancarias".

Morpurgo, que, pese al varapalo, aseguró que "vamos a seguir luchando por esto hasta que nos fallen las fuerzas", apuntó que, "obviamente y después del enorme esfuerzo realizado para que año tras año el FIMEC fuese creciendo en oferta y calidad, con este recorte presupuestario nos vamos a ver obligados a reducir el número de grupos musicales, a eliminar las jornadas de cine en Las Bodegas, a minimizar los talleres y, como consecuencia de todo esto, a dejar lo que antes era una semana plagada actividades en un festival de dos o tres días".

Con la esperanza puesta en que el equipo de gobierno, sus delegaciones de Turismo y Juventud, además del alcalde, aporten algo más al evento, el director del FIMEC destacó que, "cuando hay crisis es evidente que se tienen que producir recortes, pero estos tienen que darse atendiendo a la relevancia de los eventos, de su calidad y aceptación, y, además, desde la Administración también se tiene que liderar un trabajo que sirva para buscar en el resto de administraciones y en la iniciativa privada el respaldo económico suficiente para eso tanta veces despreciado que es la cultura".