En la mañana de ayer se procedió a la firma del Acuerdo de Condiciones Laborales del Personal Funcionario del Ayuntamiento, fruto de las reuniones de la mesa de negociación constituida por parte del Consistorio y las cuatro secciones sindicales con representación en la Administración Local (CSIF, CCOO, UGT y UPLB)

con la pretensión de sustituir al anterior acuerdo que venía aplicándose de manera prorrogada, al haber agotado su vigencia un año antes.

Una vez firmado el reseñado, queda pendiente de tratamiento en la comisión informativa y posterior aprobación en Pleno municipal.

Según un comunicado del sindicato CSIF, en el texto se contienen tres cláusulas: una de vigencia por tres años, desde el 1 enero 2013 hasta el 31 de diciembre del 2005. Otra de compromiso de comienzo de negociaciones a mediados del año 2015, de cara a la negociación de un posterior acuerdo para los años sucesivos al de aplicación al que se ha firmado. Y una tercera sobre aplicación automática de normas, disposiciones y cláusulas que sobrevinieran a lo largo del periodo de vigencia del acuerdo y que supusieran mejora en la condiciones de los funcionarios.

El sindicato CSIF destaca que en las negociaciones "siempre se ha observado unidad en el planteamiento de las cuatro secciones sindicales intervinientes y se ha combinado las necesidades y exigencias de la prestación de los servicios por parte de la Administración y a los ciudadanos con las posibilidades de paliar, en la medida de lo posible, las consecuencias que los acontecimientos de todo tipo vienen suponiendo para la condiciones profesionales y laborales de los funcionarios, quienes vienen soportando buena parte de las consecuencias de la difícil situación que vivimos".

Del mismo modo, se valora la labor del delegado municipal de Personal, Diego Rodríguez Frías, "quien ha mostrado una actitud de voluntad y decisión en llegar a pactos y acuerdos y una demostrada capacidad de trabajo, plasmada en largas reuniones, estudios de propuestas, presentación de las propias, de contrapropuestas y de búsqueda de fórmulas de conciliación entre unas y otras hasta conseguirse finalmente el resultado de un acuerdo que, sin llegar a ser el mejor posible, supone combinar la defensa de los intereses comunes con los de los servidores públicos".