Ya lo avisaban con su nombre. Son números uno y querían demostrarlo desde el primer día. Los chirigoteros del Selu volvieron a reinventarse un año más con un personaje que promete dar mucho juego y que sirvió para salvar una primera jornada de Concurso instalada en la mediocridad. Estos 'Números 1 en ventas (y gasolineras)' anuncian grandes ratos de diversión apoyados en el arma de siempre de este grupo: una capacidad casi sobrehumana para meterse en la piel de un personaje y sacarle todo el jugo posible.

En este caso, los hombres del Selu explotan a esos grupos rumberos, del estilo de Los chichos o Los chunguitos, que vivieron su momento de gloria allá por los setenta y ochenta y cuyos casettes no faltaban en ningún muestrario de gasolinera. También es cierto que en letras se espera mucho más del Selu y los suyos, con balas de fogueo en esta primera toma de contacto con el público del Falla. Es de esperar que guarden sus mejores temas para siguentes pases, siempre aprovechando un tipo original y que ofrece muchísimas posibilidades.

Y aparte del Selu... Muy poco que destacar en una primera sesión bastante mediocre, especialmente a partir del descanso. Tan sólo algunos destellos de la chirigota 'Los diestros muu diestros', que sacó partido con gracia a un tipo complicado, y la comparsa de Córdoba 'Los molto contenti', por debajo de lo mostrado otros años especialmente en interpretación. Del resto, casi mejor ni hablar.