Localidad: Cádiz

Letra: José Luis Bustelo Sánchez

Música: José Luis Bustelo Sánchez

Dirección: Lorena Bustelo Pájaro

En 2013: Las de la alegre figura (cuartofinalistas)

El tipo. Artilleros de una tropa estilo del XIX. 

Las coplas. La mecha se enciende en una presentación muy bien ejecutada. Los chicos y las chicas, sobre todo, entonan tranquilas, con fuerza, seguras y afinadas, pero con carácter. Me gusta el carácter de esta comparsa, tiene mucha personalidad. En los pasodobles enjaretan dos letras buenas pero no igual de competitivas. La primera, sobre todo, de hecho, en los mismos versos reconocen que no es una letra que busque "puntos" del jurado. Así, le cantan a Cádiz a la "Tacita de Plata", que es el nombre "más bonito" que recibe Cádiz, a gusto del autor. Por eso, cantan, su guitarra no entiende los carnavales sin una letra para la ciudad. Bonita, sí, y la entonan con mucho convencimiento, pero si nos ponemos en clave Concurso, pues esta pieza no sería un buen arma para alcanzar la gloria de la semifinal. El siguiente pasodoble sí apunta maneras. Los chicos, tras el cañón, las chicas, frente a ellos, parece, al principio, que van a ser cañoneadas. Copla a la mujer maltratada, contra todas esas cicatrices que convierten sus caras "en un campo de batalla", marcas que "no hay maquillaje que las quite". Muy hermosa, bien trabada al "horror de las trincheras" de tantas y tantas mujeres. (Para nosotras y para todos). Los cuplés, muy flojitos, al Rey Juan Carlos y a las nuevas tecnologías. El popurrí tiene cuartetas muy potentes y otras que lo reblandecen. Me gusta el grupo pero deberían haber sido más ambiciosas con su repertorio. A ver, a ver...

EN PRELIMINARES

Las coplas. Poseedores del principio de las cosas, estas artilleras y estos artilleros, con su cañón, encienden la mecha de la ilusión, de lo bello de los comienzos. Presentación preñada de metáforas, quizás no todas a la misma altura pero, al menos, explican bien una idea un tanto complicada. Me parece muy acertada la letra del primer pasodoble y la idea, profunda, que subyace en ella. “No me gustan la mujeres que en el Concurso compiten contra mujeres porque ven que con los hombres no se puede”. Bien pensado. Se cargan la igualdad, entonan y faltan al respeto de estas chicas. Así lo cantan. Sin complejos. Aquí compiten todos contra todos. “Me están sobrando esas mujeres de mi Carnaval”. Las que sólo batallan contra otras carnavaleras. Mucho menos me interesa el segundo pasodoble. “Ya te dije que tú conmigo cantarías”. Una de las componentes canta a su hija, muy pequeñita, a la que sostiene en brazos en la escena. Le presentan el Falla como cumpliendo una promesa. Un recuerdo personal que será imborrable para madre e hija. Eso es innegable. Muy bonita, no por eso, menos efectista. A mí, que estoy ajena a la, seguro, bella historia, me deja igual. Juego en el primer cuplé entre chicos y chicas. Las chicas se cansan de limpiar el cañón. Ellos se defienden que van cargados con guitarras, caja y bombo. En la segunda letra se meten con el tipo que les ha endosado Bustelo, aprovechando que el autor se ha ido. ¡Ah, no! “Que Bustelo siempre vuelve”. Está gracioso. Dan “metralla” en un estribillo cortito. Y para qué más. El popurrí sigue la estela de melodías mecidas que son marca de la casa. Me gusta como canta el grupo.