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Málaga

De vendedora de tortitas a domicilio a empresaria

  • Una veintena de mujeres emprendedoras participan en un desayuno de trabajo

Su primera relación con el mundo empresarial fue la venta de seis tortitas a varias vecinas del barrio. Treinta años después, Rosario Gines Cañizares es la propietaria de una empresa de elaboración de dulces típicos de su pueblo, Cuevas de San Marcos. "Mi marido, que era transportista, tenía el camión aparcado en la puerta debido a la crisis de los 80. Había que darle de comer a mis cinco hijos así que un día empecé a vender dulces puerta por puerta", relata la mujer que ahora está trabajando para crear una Asociación de Mujeres Empresarias en Cuevas de San Marcos, junto a otras emprendedoras del municipio.

Los inicios fueron "muy duros". "Antes no había ayudas para mujeres empresarias. En mi horno y mi cocina elaboraba mis dulces. Empecé haciendo tortitas, pero las vecinas cada vez demandaban más productos. Magdalenas, galletas, repostería fina...", cuenta Rosario que reconoce que desde pequeña le llamaba la atención el mundo de la repostería.

Tras cuatro años elaborando sus productos en su casa decidió dar un paso más y hacer realidad ese sueño de niña. "Ahora nos movemos a nivel nacional. Participamos en todas las ferias que podemos. Mi objetivo es que no se pierdan los postres tradicionales y con mi empresa lo estoy consiguiendo", afirma la mujer que participó ayer, junto a una veintena de emprendedoras, en un desayuno de trabajo.

Conchi Hinojosa, otra de las participantes en el desayuno, comenzó en el mundo empresarial hace 23 años. Con 16 años tenía claro que quería ser su propia jefa, así que con la ayuda de su familia montó su peluquería. "Ahora hay más facilidad y más ayudas. Pero antes había que luchar mucho para llegar a ser empresaria", reconoce la mujer. Conchi afirma que "gracias a la lucha de muchas mujeres muy valientes las desigualdades entre hombres y mujeres están acabando", aunque asevera que aún existen dichas desigualdades en el mundo empresarial puesto que la mayoría de los altos cargos los siguen ocupando los hombres.

Recuerda que para comenzar su negocio tuvo que pedir un préstamo al banco al que le pagaba "un 16% de interés". "En aquella época era muy difícil empezar. Ahora lo más complicado es mantenerse", señala.

Ser mujer separada, con dos hijos a su cargo y mayor de 40 años no ha sido ningún impedimento para que Paloma Uceda Garrido haya creado su negocio de hostelería. Hace año y medio puso en marcha una hamburguesería. "Con mis características es muy difícil que alguien me contrate. Así que cansada de buscar trabajo, vendí alguna propiedad, pedí préstamos al banco y decidí crear un negocio familiar", señala.

Para Rocío López la aventura empresarial está a punto de comenzar. "Quiero crear mi propio centro de belleza, maquillaje y complementos. Tengo las ideas, pero he venido al desayuno de trabajo para que la experiencia de otras mujeres me sirvan para poder llevar adelante mi negocio", afirma la joven.

Algunas de estas mujeres empresarias reconocen que son "pluriempleadas". "Aún hoy en día tengo que hacerme cargo de la casa y de mi trabajo. La igualdad que demandamos aún no ha llegado completamente, pero estamos un pasito más cerca", afirma Rosario.

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