El Cádiz no ha tenido suerte con el colegiado designado para el encuentro del próximo jueves en Tenerife, ya que pitará el último partido de 2017 Saúl Ais Reig.

El árbitro valenciano trae mal recuerdo por lo sucedido en el Mirandés-Cádiz (3-2) y el Cádiz-Huesca (1-0) de la campaña pasada. En tierras burgalesas expulsó a Gorka Santamaría por un tropezón y por beber agua, y ante los oscenses se sacó de la manga un penalti que no acabó en gol. También dio la nota esta campaña, en la Copa, en la segunda mitad del Cádiz-Osasuna (1-0).