Cádiz CF

La puerta giratoria

  • La intención del club de acometer un 'plan renove' en la plantilla otorga papeletas para cambiar de aires a los jugadores que han tenido menos minutos a lo largo de la temporada

Lucas Bijker (i) y Aitor, dos de los jugadores del Cádiz que podrían cambiar de aires este verano.

Lucas Bijker (i) y Aitor, dos de los jugadores del Cádiz que podrían cambiar de aires este verano. / fito carreto

Más de una veintena de jugadores tiene contrato en vigor en el Cádiz con vistas a la campaña entrante pero no todos los que tienen vínculo laboral con el club continuarán. Soplan vientos de cambio. El director deportivo, Juan Carlos Cordero, y el entrenador, Álvaro Cervera, han decidido acometer una amplia renovación en la plantilla y eso supone que para propiciar el aterrizaje de nuevos futbolistas hay otros que deben cambiar de aires para hacer hueco en el grupo. La puerta se abre a la vez para las entradas y las salidas en un verano que se espera movido mientras el mercado esté abierto hasta el 31 de agosto. El objetivo, diseñar un plantel lo más competitivo posible con la permanencia como reto prioritario.

El plantel está de vacaciones pero Cordero tiene trabajo por delante. La vuelta al trabajo está fijada para el próximo 9 de julio. Para entonces quizás haya ya algún jugador con contrato en vigor que ya haya encontrado destino en otra escuadra.

La primera parte de la operación salida ha quedado resuelta con la marcha de los futbolistas que terminaban su vínculo laboral con el Cádiz. No continúan Rubén Yáñez, Mikel Villanueva, Eugeni Valderrama ni Jona Mejía, que pertenecieron al conjunto amarillo en calidad de cedidos y ahora vuelven a sus clubes de origen -Getafe, Málaga, Valencia y Córdoba, respectivamente-. En el caso de otros tres expiraban su contrato, la entidad no ha dado el paso para su renovación y por tanto no siguen: Rafidine Abdullah, David Barral y Khalifa Sankaré, este último después de haber pasado una temporada en blanco inmerso tras ser operado de una rodilla el pasado verano.

Quedan 22 futbolistas con contrato, aunque no todos seguirán, como avanzó Cordero el pasado miércoles. Algunos tienen la posibilidad de salir en operaciones de traspaso que aliviarían lar arcas del club y permitirían rearmar la plantilla. Los nombres que más suenan para dar un salto a un equipo de Primera División son los de Álvaro García y Salvi. En el supuesto de que se vayan los dos o uno sería siempre en beneficio económico del Cádiz, que dispondría de un buen puñado de millones para seguir creciendo, aunque no se presentaría nada fácil la tarea de suplir a dos futbolistas claves en las últimas campañas que han sido soportes fundamentales en el estilo de juego gracias a su velocidad a la contra.

El primero es hacer las maletas podría ser Lucas Bijker, al que la prensa holandesa -la de su país- vincula al Mechelen de Bélgica. La cuestión es si su posible marcha supone ingresos para el club o simplemente se va liberado de sus dos años de contrato. El lateral izquierdo ha gozado de más minutos que Brian en el costado zurdo de la zaga, pero la idea es contar con un futbolista con un perfil más defensivo. Se desconoce además que sucederá con el propio Brian, con contrato hasta 2021 después de que el club desembolsara medio millón de euros por él. El catalán firmó una campaña irregular aunque si se va Lucas él tendría opciones de quedarse y cumplir su tercera temporada de amarillo y azul. En caso de salir, sería traspasado para recuperar la inversión.

Otros jugadores tendrán que afrontar la dura realidad al no entrar en los planes de cuerpo técnico. La misión más complicada es la relacionada con los descartes.

Un vistazo al minutaje que han tenido los jugadores durante el desarrollo de la temporada que llega a su fin refleja con meridiana claridad quiénes son los que menos han contado para Álvaro Cervera y tienen más posibilidades de salir. Moha Traoré, Nico Hidalgo y Aitor tuvieron poco protagonismo, no sólo por la escasez de tiempo sobre el césped sino por un hecho que destapó la realidad. Cuando Salvi o Álvaro García, titulares indiscutibles, no estuvieron disponibles, el entrenador no recurrió a sus recambios naturales y apostó antes por otros jugadores que no son extremos, como fueron los casos de José Ángel Carrillo y David Barral, sobre todo en el último tramo del campeonato.

Cervera no contó con los extremos suplentes, que a priori parten con opciones de dejar el club. Moha Traoré tiene dos años más de contrato -hasta el 30 de junio de 2020- pero solo participó 159 minutos en 11 encuentros de Liga -marcó un gol en el duelo en casa contra el Sevilla Atlético-, el que menos de toda una plantilla en la que él fue el único que no disfrutó de la titularidad los fines de semana -sí formó parte del once inicial sólo en los encuentros de la Copa del Rey-. A tenor de su recorrido a lo largo de la campaña, no tiene nada fácil su continuidad. Tampoco Nico Hidalgo, que sólo dispuso de 439 minutos en el las 11 citas del torneo de la regularidad en las que participó -cuatro desde el principio-. Le queda un año de contrato aunque podría ser uno de los jugadores cortados en verano si se tiene en cuenta su escasa influencia.

El caso de Aitor es más llamativo. El onubense empezó el curso con un sitio en la alineación hasta el punto de ser titular en nueve partidos de la primera vuelta. Pero poco a poco fue perdiendo protagonismo y quedó relegado a la suplencia en la segunda, en la que sólo empezó un envite -contra el Lugo- y participó en ocho para alcanzar un total 18 duelos ligueros y 930 minutos -de ellos menos de 330 en la segunda vuelta-. Fue de más a menos y su permanencia es toda una incógnita aunque tiene firmado dos años más -hasta 2020-.

Dani Romera fue el delantero menos utilizado durante la temporada, en buena medida por algunas lesiones que le impidieron pujar por un puesto. El club pagó 350.000 euros al Barcelona por su fichaje hasta 2021 y en principio es el único ariete junto a Carrillo a la espera de dos más que debe incorporar el club. No parece que el almeriense vaya a salir después de la inversión.

Fausto Tienza es el único de los tres futbolistas que recalaron en enero que tiene contrato en vigor. Hasta junio de 2019. Llegó como recambio natural en la medular de Jon Ander Garrido -el único pivote defensivo que hasta entonces había en la plantilla- pero a la hora de la verdad Cervera contó poco con el extremeño, cuya participación se redujo a poco más de 170 minutos en cinco partidos -dos en el once inicial-. Su permanencia en el plantel está en el aire.

Los dos jugadores que el Cádiz tenía cedido en otros equipos regresan con visos de tener que volver a marcharse si no hay sorpresas. El lateral izquierdo Tomás vuelve después de haber militado en el Toledo y, con dos más de relación laboral con la entidad cadista, la lógica apunta a una nueva cesión.

El delantero Eneko Jauregi es un desconocido para la afición aunque pertenece al Cádiz, que lo fichó el pasado mes de enero procedente del filial de la Real Sociedad para cederlo al Córdoba. En el cuadro verdiblanco sólo jugó 189 minutos en 11 partidos, todos como suplente.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios