Antonio Muñoz aseguraba días pasados que las todas las acciones que ha vendido a Sinergy eran suyas. Pero no está tan claro a tenor de la investigación realizada por Enrique Moreno, accionista minoritario del Cádiz que asegura que de las 69.182 acciones transmitidas por el empresario cordobés al grupo italiano (un 50,5% del total), 13.128 (un 9,65%) no eran propiedad de Muñoz, sino del Grupo Deportivo Bahía de Cádiz.

Un día antes de la celebración de la junta de accionistas, Moreno acudió con un notario a las oficinas del Cádiz, que dio fe de que esas 13.128 acciones están inscritas a nombre del Grupo Deportivo Bahía de Cádiz en el censo de accionistas del club que hace las veces de libro, porque éste no existe como tal.

¿Cómo puede vender Muñoz una acciones que en el libro de accionistas no constan como suyas? Moreno asegura que "se ha llevado a cabo una operación irregular que se puede calificar de chanchullo. No sé si es una falta, un delito o lo que sea, pero se ha hecho de manera irregular". El hasta hace poco dueño de la mayor parte de las participaciones del club esgrime la posesión de un título que acredita que las susodichas acciones son suyas, pero "ese título lo expide el club en noviembre de 2009 con la firma del propio Muñoz y del entonces secretario Martín José García", expone Moreno antes de explicar que en el caso de que las acciones de marras hubieran pasado a posesión de Muñoz, debió haberse producido una transmisión de las mismas que no consta en ninguna parte.

Las acciones a las que se refiere Moreno son las que van de la 38.364 a la 51.582, y esas son del Grupo Bahía según el libro del Cádiz. El propio Consejo Superior de Deportes, a información solicitada por Moreno, confirmó que esas acciones estaban incluidas en la operación de compraventa formalizada entre el empresario cordobés y Sinergy a finales de pasado mes de agosto.

Lo curioso del caso es que el título expedido en noviembre de 2009 refleja que son 16.472 las acciones que Muñoz presuntamente tomó del Grupo Bahía, aunque en la venta a los italianos no empleó todas, se desprendió las necesarias (las 13.218 mencionadas) para que la transmisión sumara el 50,5% del total y los nuevos dueños tuvieran la mayoría, como de hecho tienen tras la firma de la compraventa hace un par de semanas.

A Moreno le llama la atención que el propio Muñoz, en la junta de accionistas celebrada el pasado 31 de mayo, "actuara en representación del Grupo Bahía" cuando ya tenía el título de las acciones a su nombre.

Moreno no pertenece al Grupo Bahía, pero pide a sus miembros que insten a la nulidad de la compraventa de esas 13.218 acciones que no son de Muñoz. Federico González y Francisco Puig, entre otros, pertenecen a este grupo y en su día fueron de la mano con Muñoz, aunque desde hace tiempo se sienten engañados por él. A ellos les correspondería, en su caso emprender acciones legales si así lo considera. De hecho, Puig aseguró en la última junta de accionistas que Sinergy firmó de buena fe unos documentos "que le presentaron manipulados por Muñoz", del que dijo que "nos ha dejado tirado de manera miserable".

Moreno espera que haya un final feliz. "Que Sinergy renuncie a esas 13.218 acciones que no pertenecieron a Muñoz y se reintegren al Grupo Bahía".