El director deportivo del Cádiz, Juan Carlos Cordero, reconoció ayer, a pregunta de los periodistas durante el acto de presentación de Juan Hernández, que la situación de Álvaro García "es difícil y convulsa" y que esa situación está dificultando el desarrollo del mercado de fichajes. Explicó que el jugador "está entrenando bien" y por tanto lo normal es que "esté disponible" para participar en el Trofeo Carranza mañana y el sábado si el Cádiz se mete en la final. Si no sufre ninguna molestia física que el médico aconseje que descanse, "decidirán el entrenador y también el jugador. Mi postura como miembro del club es que esté disponible si el entrenador lo cree oportuno. La situación no es sencilla".

Cordero recalcó que "todos los jugadores van a estar disponibles para jugar -en alusión al Trofeo-, pero la situación que hay no es sencilla". Se refirió a todos los que no arrastran algún tipo de molestia física.

Álvaro García tiene contrato hasta 2022 y una cláusula de rescisión establecida en ocho millones de euros. Para que pueda cambiar de aires tiene que llegar una oferta que interese a las dos partes -al club y al jugador-. "La situación es incómoda para todos", señaló sin rodeos el responsable de la parcela deportiva. Aseguró que "no hay una oferta firme por el futbolista y es normal que el entrenador quiera contar con el jugador, querrá que jueguen los mejores cuando empiece la Liga, que ya queda poco" -el día 17 en casa frente al Almería-, indicó Cordero, que admitió que el utrerano "ha pedido que se escuchen ofertas por él, es algo evidente".

El director deportivo recordó que es el presidente, Manuel Vizcaíno, quien decide sobre la cantidad por la que será vendido el extremo en el caso de que salga. Hasta ahora el presidente se ha remitido a la cláusula de salida.

Cordero afirmó que el mercado "está siendo difícil por la situación en la que nos encontramos. Trabajamos en supuestos económicos, deportivos y de posiciones". De hecho, aseguró que es el mercado "más difícil desde que estoy en el Cádiz".

El director deportivo no ocultó que el camino se vuelve empedrado en las últimas fechas. "No sabemos dónde estamos" en el mercado. "Hemos traído jugadores pero, ¿qué pasos más se pueden dar sin saber dónde vamos a estar? Hay que mirar la parte del jugador, del entrenador, la mía, la del club, todas son entendibles", añadió en relación a la situación de Álvaro García.

Insistió en que a día de hoy "no hay ofertas" por el extremo. "Hubo un par de ofertas hace tiempo, ahora lo único que hay son llamadas, las habituales que hacemos todos, pero no son ofertas. Cuando tenga una que sea firme de su agente o de algún un club la trasladaré al presidente".

El asunto de Álvaro García sigue enquistado y la postura del club es que si no tiene problemas físicos debe ser uno más a disposición del entrenador, que es quien tiene que decidir ahora si cuenta con un futbolista que en condiciones normales ejerce el papel de titular.

El Trofeo Carranza será una prueba de la situación. Si no hay ofertas, es un jugador de la plantilla que tiene sus obligaciones con el Cádiz.

Las llegadas que vayan a producirse a la plantilla en las próximas semanas -hasta el día 31 está abierto el mercado- "dependen del control económico de la Liga de Fútbol Profesional. No hay ningún jugador más atado a día de hoy porque los jugadores no esperan", añadió Cordero.