La plantilla del Cádiz se entrena a tope con el propósito de vencer al Alcorcón el próximo domingo -a partir de las ocho de la tarde en el estadio Ramón de Carranza-. La sesión desarrollada ayer en la ciudad Deportiva de El Rosal estuvo marcada por el 53 cumpleaños de Álvaro Cervera. El técnico regaló a sus jugadores una hora y media de intenso trabajo en la que no faltaron los ensayos en defensa y por supuesto los lanzamientos a puerta.

Una de las asignaturas pendientes de los amarillos es el acierto en el remate y ayer se pusieron el mono de trabajo para tirar una y otra vez a puerta. El domingo tendrán que afinar la puntería para poder tener opciones de sumar los tres puntos frente a un Alcorcón que llegará al Carranza en plena racha defensiva. El conjunto alfarero lleva tres partidos consecutivos sin recibir un gol y en su cuenta de tantos de contra sólo aparecen dos. El Málaga, con uno, es el único mejor en ese apartado.

José Mari ya se ejercita con normalidad y apunta a la convocatoria

El cuadro madrileño se caracteriza por una defensa sólida que concede escasas ocasiones al contrario. El Cádiz se las tendrá que ingeniar para crearlas y además introducir el esférico en la portería. Nada mejor que un adversario fuerte, que sólo ha perdido contra el intratable líder -el Málaga es el único que cuenta las jornadas por victorias, para poner a prueba la mejoría experimentada en el Carlos Belmonte.

La novedad de la sesión de ayer fue la presencia de José Mari una vez superada la gastroenteritis que le impidió participar en el encuentro contra el Albacete. Si no surgen contratiempos, el medio roteño estará disponible para al menos entrar en la convocatoria, como así parece. Garrido ya se entrena pero aún es pronto para que empiece a jugar y Karim Azamoum tampoco se vestirá de corto el domingo. Sí tiene papeletas para entrar en la lista Mario Barco. El míster tiene mayor margen de elección esta semana.