La gran novedad fue que no hubo novedades. El director deportivo del Cádiz, Roberto Suárez, compareció ante los medios en El Rosal sólo para repetir una y otra vez que la planificación deportiva se encuentra "en stand-by" y que "no se puede hacer nada" hasta que el Consejo y los administradores concursales, que se reunirán la próxima semana, decidan el presupuesto y las líneas de actuación de la entidad para 2011/2012.

Así que ni bajas, ni altas, ni nada. Suárez sólo se salió del guión para referirse a la "incidencia" que Raúl López reveló acerca de su contrato, y es que el club ha comunicado al capitán que la claúsula de renovación automática de su contrato "especifica claramente que tiene que jugar más de 25 partidos para estar renovado" y el jerezano se ha quedado en el límite que marcan esos 25 encuentros. Por parte de club y jugador hay predisposición para alcanzar un acuerdo, aunque el asturiano advierte que "una vez sepamos con qué presupuesto contamos veremos en qué condiciones podemos renovar a Raúl".

El máximo responsable de la parcela deportiva en el Cádiz no esconde las dificultades por las que está pasando el club y lanzó un aviso para navegantes, "queremos a jugadores que estén dispuestos a pasar por eso". Respecto a los ocho jugadores con contrato en vigor, Suárez afirmó que "deportivamente contamos con todos pero antes tendremos que hablar con ellos y que sepan lo que van a encontrarse, el que se quede que lo haga con todas las consecuencias".

"Mi objetivo lo he cumplido"

Pospuesto el capítulo de altas y bajas hasta nueva orden, el director deportivo amarillo defendió el trabajo realizado durante la temporada asegurando que "mi objetivo lo he cumplido". La meta marcada por el club se situaba en confeccionar una de las cuatro mejores plantillas del grupo y llegar al 'play-off' y así fue, aunque Suárez también reconoce errores a la hora de conformar un bloque, ya que "podemos firmar a los once mejores jugadores de Segunda B y no hacer un buen equipo", a la postre lo más importante.

Con la conciencia tranquila el asturiano sólo piensa en "seguir trabajando" a la espera de ver como quedan las cosas en el club y para ello confía en su buena sintonía con Jose González, con el que se encuentra "muy a gusto". Ambos tienen en mente un plan para la próxima temporada aunque "a día de hoy no sabemos si lo que queremos va a ser posible". Por eso, "cuanto antes quede una línea marcada mejor para el futuro del club", cerró.