El Cádiz CF sabe que se tiene que enfrentar a todos los equipos de Primera División, denominada Liga Santander, y que después de dos enemigos parejos, ubicados en el mismo objetivo de la permanencia, este domingo cambia la tendencia y se presenta como adversario uno de los grandes de España e incluso de Europa, donde acumula éxitos en los últimos años. El Osasuna y el Huesca nada tienen que ver con el 'león' hambriento que se presenta en el Ramón de Carranza. Un 'león' herido porque el Bayern acuchilló su corazón ganador y la 'fiera' quiere volver a mostrar los dientes. Todo ello con el Cádiz enfrente en el que será el primer partido de Liga del Sevilla.

La competición en la élite para un humilde como el equipo gaditano cuenta casi siempre con cuestas empinadas y caminos repletos de dificultad para uno de los últimos de la clase. El encuentro de este domingo es el primer puerto de montaña para el Cádiz; una escalada permanente para estar a la altura de la exigencia de un enemigo poderoso. Es la única manera de aspirar a algo.

Cervera y sus ayudantes estudian meticulosamente cada rival y saben que hay pocos lugares por los que se pueda sorprender a Lopetegui y sus guerreros. Evidentemente hay puntos débiles en el cuadro hispalense pero hay que oponer argumentos y criterios para alcanzarlos. Esperar, pese a lo complejo, el error del contrario como hizo el portero del Huesca en el gol de Negredo hace una semana. No es el Sevilla un conjunto de fallos de ese calibre, aunque hay que cruzar los dedos.

Más importante es que el Cádiz cometa los mínimos errores porque, ya se sabe, en Primera tienen una alto índice de 'mortalidad' Lo hizo el Osasuna en el estreno liguero, más peligroso aún contra un Sevilla con jugadores de primer nivel en el balompié mundial. Y es que la receta para aspirar a ser el equipo sorpresa de la jornada no es fácil de ejecutar ni está al alcance de todos. El Bayern, todo un referente del balompié alemán y actualmente del planeta fútbol, sudó lo indecible para que su maquinaria acabara por destruir la del Sevilla, con la ilusión que arrastra y el lema grabado con sangre: 'Dicen que nunca se rinde'.

Queda feo, muy feo, insinuar que estos son partidos que duelen menos si se pierden. Todos valen tres puntos porque es lo mismo, a efectos clasificatorios, ganar al Huesca que al Sevilla. Otra cuestión es el aspecto anímico si la campanada se produce en el Carranza. La mentalidad cadista no debe variar ni confundir el respeto -para todos los enemigos- con el miedo, ya que el segundo lleva a salir derrotado desde antes de empezar.

Álvaro Cervera, desde su aislamiento obligado por el positivo, tiene argumentos para trasladar a su ayudante, Roberto Perera, que jueguen los mismos que empezaron en El Alcoraz. Sin embargo, hay que analizar detenidamente lo que supone la dimensión de los hispalenses sobre el verde y lo que exige su intensidad. Es por ello que no hay que descartar que Jens Jonsson dejara su lugar de inicio a Augusto Fernández. El danés llegó justo de fuerzas al descanso en el choque contra el Huesca. Augusto tiene mucha experiencia ante retos como enfrentarse a uno de los mejores Sevilla de la historia.

No hay que descartar alguna variación por algún problema físico o decisión técnica. Por ejemplo, en la portería han jugado David Gil y Alberto Cifuentes; si la experiencia tiene peso en el derbi andaluz de esta tarde, el portero de 41 años, el 'abuelo' de la Liga, parte con más opciones.

La victoria en tierras aragonesas se presenta como una muestra de no tocar lo que ha funcionado bien, a pesar de que cada partido es un mundo y precisamente enfrentarse al actual Sevilla lo es aún más.

Alineaciones probables

Cádiz: Cifuentes, Iza Carcelén, Marcos Mauro, Cala, Espino, José Mari, Augusto Fernández o Jonsson, Salvi, Pombo, Álex Fernández y Negredo.

Sevilla: Bono, Jesús Navas, Koundé, Diego Carlos o Sergi Gómez, Acuña, Rakitic, Gudelj, Óliver Torres, Ocampos, De Jong y Óscar Rodríguez.

Árbitro: Medié Jiménez (catalán).

Estadio: Ramón de Carranza (18:30/Movistar LaLiga).