El Cádiz B, que mañana disputará ante el Alavés B (12:00 horas) el partido de vuelta de la segunda eliminatoria de la fase de ascenso a Segunda B, asume todo el protagonismo en el primer fin de semana de vacaciones del equipo profesional. El filial defiende el 0-2 logrado en Vitoria.

Baldomero Hermoso Mere, entrenador del Cádiz B, apura la preparación sabiendo que Momo Mbaye y Braganza son bajas, algo casi habitual en la segunda mitad de temporada. El técnico huye de euforias y de exceso de confianza tras el triunfo por 0-2 en la ida y pide a sus pupilos máxima concentración para ir a por el encuentro desde el principio. "Debemos afrontarlo de la misma manera que en las dos últimas temporadas, siendo un equipo que no especula, y pensar que no se ha jugado el partido de ida. Este encuentro hay que afrontarlo con mentalidad ganadora, la de siempre, sin mirar al resultado que tenemos. Los jugadores están centrados y son humildes", afirmaba ayer el preparador.

La plantilla del Cádiz B entrenó ayer en las instalaciones de El Rosal, donde lo hará por última vez hoy antes de que el técnico convoque a todos los jugadores que tiene disponibles. La plantilla desea que mañana la afición llene el campo Ramón Blanco, el escenario principal de la ciudad deportiva. "Necesitamos del aliento de la afición y esperamos un buen ambiente", dijo Mere.