El entrenador del Cádiz, Álvaro Cervera, confía en el pronto regreso del equipo a la senda de la victoria después de seis jornadas consecutivas sin ganar. Cuerpo técnico y jugadores redoblan su esfuerzo con el objetivo de acabar cuanto antes con una racha negativa que ralentiza la progresión de un equipo que avanza con pasos cortos. Cervera reconoció ayer, tras el maratón de tres partidos en ocho días, que la presente ha sido una semana "más tranquila porque nos ha permitido entrenar varios días seguidos. Empezamos algo dolidos por el último empate, pero nos hemos preparado para el encuentro contra el Huesca".

Una de las tareas ha estado enfocada al plano psicológico para reforzar la moral de la plantilla, aunque el técnico reconoció que "la hacen casi los mismos jugadores, se dan cuenta de que no se pueden hacer muchas cosas bien y tirarlo todo en diez minutos". Se refería al empate en casa ante la Cultural Leonesa tras ir 2-0.

En la rueda de prensa que ofreció en la Ciudad Deportiva de El Rosal a modo de previa del envite como visitante ante el Huesca, el míster se remontó al doloroso el 3-0 sufrido en Lorca para asegurar que en los compromisos que llegaron después de aquel varapalo "no hicimos tantas cosas malas para lo que nos está pasando. En Sevilla empatamos y aquí contra la Cultural Leonesa lo tiramos todo al final después de hacer las cosas bien. Hay que transmitir al jugador que hay muchas cosas que se hacen bien pero las malas, aunque sean menos, nos penalizan".

El inquilino del banquillo es consciente de la situación. "Creamos un ambiente bueno alrededor del equipo. Todos creían en él y eso se ha perdido un poco. Trabajamos con el deseo de volver a buscar victorias, que es lo que cuenta".

El técnico opina que su equipo atesora una base sólida aunque no esconde que debe cuidar algunos aspectos que redunden en el aumento de la producción de puntos. "Seguimos teniendo empuje, sabemos a qué jugamos, pero no se nos pueden escapar partidos como el del otro día. Sin hacer buenos encuentros antes podíamos ganar y ahora nos pasa al contrario", indicó Cervera antes de hacer hincapié que en la competición "el resultado es lo que queda".

El entrenador considera que el Cádiz, ubicado en la 11ª posición una vez disputadas las diez primeras jornadas, ocupa "un sitio normal en la clasificación". Está igual de cerca de la zona noble que de la parte trasera y habló de la necesidad de dar un paso al frente. "Hay que apretar a ver si podemos estar arriba con los grandes equipos que hay esta temporada en la categoría. El sitio en la tabla hay que ganárselo".

Cervera resaltó el potencial del Huesca, sobre todo en su feudo, donde no conoce la derrota en el campeonato de Liga. "Por el entrenador que tiene quizás empleará un 4-3-3. Es un equipo que sabe tratar la pelota con cariño, sin un delantero grande arriba, es un equipo bueno a balón parado y con gol con llegada desde la segunda línea. Sólo con eso es muy peligroso, pero tiene más cosas. Es difícil ganar allí".

El Cádiz afronta una misión complicada pero no imposible, con el deber de mejorar en varios aspectos del juego, una de ellos la estrategia, según el técnico. "Debemos mejorar a balón parado", apuntó sin dudarlo Cervera, que concedió galones a Alberto Perea en esa faceta. "La baza de Perea es importante, aunque el otro día estaba muy cansado después de mucho tiempo sin ser titular. Cuando él está bien hay garantías con el balón parado".

Los amarillos perdieron dos puntos en la recta final del choque contra el conjunto leonés. Álvaro Cervera fue preguntado si ello se debió a un bajón físico del equipo pero el técnico tiene claro que ese no fue el problema y expuso su argumento. "Hubo un partido que corrimos menos kilómetros que el rival, fue contra el Lorca, pero el otro día corrimos lo mismo que el contrario. En el último encuentro hubo futbolistas que no jugaban 90 minutos seguidos varios encuentros consecutivos".