La Operación Líbero continúa en marcha con la declaración esta semana en la Audiencia Nacional de personas que tienen vínculos familiares y profesionales con Quique Pina, consejero delegado del Cádiz que fue detenido el pasado 31 de enero en su domicilio de Molina de Segura, en Murcia, por presuntos delitos de blanqueo de capitales, insolvencia punible y contra la Hacienda Pública.

En la mañana de ayer fue el turno del director deportivo del Cádiz, Juan Carlos Cordero, que fue citado a declarar en calidad de testigo, condición que mantuvo una vez finalizada su intervención en la capital de España. El día anterior había declarado como testigo David Navarro, gerente deportivo del club. Agentes policiales les requirieron documentación a ambos durante el registro efectuado el día 31 de enero en las oficinas de la Ciudad Deportiva de El Rosal.

También declaró ayer en la Audiencia Nacional Jorge Cordero, actual director deportivo del Elche, cargo que en su día ostentó en la entidad cadista. Lo hizo de igual manera como testigo.

El titular del Juzgado Central número 5 de la Audiencia Nacional, el gaditano José de la Mata, decretó el pasado viernes prisión sin fianza para Quique Pina como medida preventiva para evitar la posibilidad de que el actual consejero delegado pudiese destruir pruebas. La instrucción sigue abierta y el consejero delegado del Cádiz está en Soto del Real.