José Ángel Carrillo puede tener sus días contados con la elástica del Cádiz, ya que el delantero y el Córdoba han alcanzado un acuerdo que sólo queda pendiente de un visto bueno del club gaditano que a su vez está supeditado a la incorporación de refuerzos para la plantilla que comanda Álvaro Cervera.

Aunque desde el club gaditano ni se confirma ni se desmiente, la falta de oficialidad de la operación se debe a la negativa de la entidad que preside Manuel Vizcaíno a cerrar una nueva operación de salida sin que se haya hecho efectivo siquiera el primer fichaje del mercado de invierno. Cabe recordar que hasta la fecha ya han dejado el plantel el extremo portugués Salvador Agra, que regresó antes de tiempo de su cesión al Benfica, aunque luego fue traspasado al Legia Varsovia, y el centrocampista francés Karim Azamoum, cedido al Elche.

Además, el entrenador ya ha dejado bien claro en varias ocasiones que necesita con urgencia dos extremos y sobre los delanteros se ha limitado a decir que si se marcha uno de determinadas características tendrá que venir otro similar. Cervera reclama una segunda unidad para los costados y a buen seguro le hará poca gracia que vayan saliendo hombres de otras demarcaciones sin que se produzca ninguna incorporación.

Por lo que se refiere a la más que posible marcha de Carrillo, cabe recordar que el atacante murciano, que aterrizó en la disciplina cadista la pasada temporada, no ha llegado a convertirse en el 9 de referencia a pesar de gozar de titularidades y minutos en la campaña y media que lleva de amarillo. En el presente curso ha participado en 14 encuentros, en tres de ellos como titular, en Albacete, en Liga, y en Copa del Rey contra el Zaragoza y la vuelta ante el Espanyol. En los poco más de 400 minutos que ha permanecido sobre el césped únicamente ha marcado un gol, el 3-0 al Deportivo, muy celebrado con sus compañeros.

Carrillo ha sido el hombre elegido por el Córdoba para reforzar su parcela ofensiva, toda vez que se da por segura la salida de Erik Expósito, la gran decepción en lo que va de temporada, en este mercado de invierno. El murciano llegaría con la carta de libertad, pese a tener contrato con el Cádiz hasta junio de 2020, y firmaría por lo que resta de curso y dos años más, según el acuerdo alcanzado entre las partes en los últimos días.

Así pues, ahora mismo el único fleco que falta es el ok del Cádiz, sobre todo después de que el Córdoba ya haya liberado dos fichas con la salida de Bambock y Jovanovic, y tenga margen de maniobra económico con la masa salarial liberada por ambos y las operaciones de traspaso tanto del extremo serbio como de Guardiola y Aguado, cuyo desenlace debe producirse en las próximas horas.