Empate sin goles del Cádiz B en el partido de presentación que esta tarde ha disputado con el St. Joseph's. Los amarillos han dominado buena parte del choque pero su pelea con el gol que le persigue esta pretemporada ha salido de nuevo a relucir para desesperación de su técnico, Juanma Pavón. El adversario, que dirige el ex cadista Raúl Procopio, ha aguantado con entereza a pesar de su teórico papel de víctima.

El filial amarillo llevó el peso del choque en la primera parte gracias a su mayor control en la zona ancha y la verticalidad de Mady y Luna, quienes más próximos a la banda provocaron que la zaga gibraltareña pasara por serios apuros. Las principales llegadas llevaron la rúbrica de los amarillos, empezando por Chapela con un tiro cruzado (6’) y siguiendo con este mismo jugador, quizás la mejor hasta el descanso, en un remate que salvó la defensa 'in extremis', y con Sergi, cuyo lanzamiento se escapó por encima del travesaño.

Después de otro tiro alto de Mady, el tramo final del primer periodo cambió las tornas y el St. Joseph’s se envalentonó hasta ganar fortaleza en la medular y empezar a ver de cerca la portería de Juan Flere. La oportunidad de oro de los visitantes se produjo en el minuto 41, cuando Domingo realizó un acción personal por la derecha en la que regateó y lanzó raso muy cerca de la base del poste izquierdo del filial.

Con esa misma tendencia acabó el primer acto de un encuentro que varió la intensidad de bando del amarillo al blanquiazul y que se pudo considerar entretenida por el entusiasmo de ambos contendientes ante los pocos valientes que desafiaron la alta temperatura en una jornada festiva.

El segundo tiempo trajo el habitual carrusel de cambios en ambos conjuntos para repartir minutos y mantener la frescura difícil de encontrar a esta altura de pretemporada. Tanto Juanma Pavón como Raúl Procopio plantearon el segundo acto con el deseo de aumentar la puntería el primero de ellos y la profundidad en el caso de los gibraltareños.

El juego estuvo más equilibrado en el primer tramo de la reanudación porque el St. Joseph’s soltó un poco el complejo con el que empezó aunque le costaba trenzar para superar el entramado amarillo. Ernesto y Clinton, éste de falta directa, tuvieron la ocasión de inaugurar el marcador, así como Mady en un latigazo que buscaba el palo largo de la portería de los gibraltareños.

Pero superado el ecuador de este segundo tiempo de nuevo el Cádiz B tomó el poder en el encuentro amistoso y trató de romper una igualdad ficticia. Lo intentaba tocando y buscando a sus piezas ofensivas si bien Raúl Procopio demostraba conocer las cualidades y las carencias de este filial que debutará en Segunda B en poco más de una semana.

Después de la parada técnica para que los jugadores se refrescaran, el cuerpo técnico del filial analizaba las opciones para evitar un resultado discreto en la puesta de largo veraniega ante los suyos. A falta de 15 minutos para la conclusión había que echar el resto para desnivelar el marcador.

En esta fase a Javi Pérez y Duarte se les empezó a exigir que tuvieran más balón, que dieran una lógica a la circulación para suministrar a los atacantes; lástima que a Chapela le fallara algún control en la línea de tres cuartos.

Lo más inquietante para los intereses capitalinos era que el St. Joseph’s no sufría como podía esperarse en un principio, aunque tampoco olía el esférico lo suficiente para plantearse una contra como vía ideal para sorprender a su rival.

Cada vez era más complicado jugar en los instantes finales porque el St. Joseph’s manejaba bien la situación y el filial se enfrascaba en un querer y no poder. Así hasta el final.