Cádiz CF

Ni chaparrón ni lluvia

  • Charla sin bronca de Cervera a sus pupilos para corregir los errores de Córdoba en un regreso a los entrenos en el que el cielo asusta pero respeta

Los jugadores se ejercitan en campo número 4 de El Rosal.

Los jugadores se ejercitan en campo número 4 de El Rosal.

El Cádiz ha regresado al trabajo este martes en la Ciudad Deportiva de El Rosal con una sesión que Álvaro Cervera ha aprovechado para corregir las cosas mal hechas el pasado domingo en el Nuevo Arcángel, errores que por fortuna no se tradujeron en un resultado negativo porque la efectividad permitió amarrar los tres puntos en la recta final.

En la vuelta a los entrenamientos tampoco hubo novedad en forma de ausencias, de modo que pisaron el césped todos los integrantes de la plantilla con las excepciones ya conocidas de Servando y Juan Hernández. Manu Vallejo, que fue sustituido en el partido de Córdoba con molestias, se ejercitó sin problemas junto a sus compañeros.

Como era previsible, el técnico dirigió una sesión de relativa intensidad. El balón, en rondos y minipartidillos, se convirtió en protagonista principal en la mayor parte de un entrenamiento en el que, como viene sucediendo en las últimas semanas, el ambiente se nota más distendido después de los últimos marcadores.

Finalmente, ni chaparrón ni lluvia. El preparador hizo su trabajo al advertir a sus jugadores que por el camino de los peores minutos frente al cuadro verdiblanco no llegarán a ninguna parte. El descontento de Cervera pese al triunfo al final del choque era evidente. Quiere la victoria y que su equipo juegue a lo que, a su entender, debe jugar. No hay más. También respetó el agua. El cielo amenazó pero se quedó en eso.

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