El Deportivo de la Coruña toma la delantera mirando a la banda izquierda y parece que mete la directa en la pelea por el fichaje de Álvaro García. El club gallego lleva tiempo siguiendo al extremo, pero la semana que comenzó ayer parece que abre un antes y un después en el interés del conjunto blanquiazul. Pepe Mel tomó buena nota del utrerano y todo apunta a que sus indicaciones se están trasladando a una ofensiva para conseguir al veloz jugador utrerano. Los dirigentes del Dépor preparan la estrategia; los del Cádiz, atentos a la oferta. Hagan apuestas.

Son varios los conjuntos que han estado siguiendo la evolución del futbolista del Cádiz en los últimos meses, aunque lo cierto es que el Dépor es uno de los que muestra mayor interés hasta el punto de que en el encuentro Cádiz-Tenerife, correspondiente a la ida de la primera eliminatoria por el ascenso a la máxima categoría, fue el propio Pepe Mel el que se desplazó hasta la capital gaditana para asistir al duelo celebrado en el Ramón de Carranza. El entrenador del Deportivo sacó sus propias conclusiones de un futbolista codiciado y por el que suspiran varios conjuntos. Uno de ellos es el que él dirige.

La situación actual muestra al cuadro coruñés con el interés de siempre, el que no ha ocultado desde un primer momento, pero en este caso ha entrado en una fase de pretemporada en la que pretende ajustar su plantilla para que cuando vuelva al tajo mañana sea la más aproximada a la que tendrá Mel en el momento en el que arranque la competición oficial. Álvaro García es objetivo del Dépor aunque, claro está, encima de la mesa siguen pesando los seis millones de euros que aparecen en su cláusula de rescisión porque tiene contrato en vigor. Siendo el Dépor uno de los equipos que entró en concurso de acreedores con una deuda mayor comparándola con la de otras entidades del fútbol español, la realidad es que las arcas han recibido una importante inyección económica fruto del acuerdo con Abanca, que le ha concedido un préstamo de 45 millones de euros. De esta forma la entidad ha visto como su tope salarial aumenta desde los 24,7 millones hasta una cantidad que oscila entre los 35 y los 40 millones, por lo que se encuentra ahora en mejor disposición para tratar fichajes como el del extremo cadista o recuperar a Lucas Pérez, que busca una salida del Arsenal, tras una campaña con poco protagonismo.

Este año, con un montante superior, el Deportivo buscará primar, como reconocía el presidente, "calidad por cantidad", pero eso no tiene porqué traducirse en que dilapide toda la partida reservada a la plantilla. La variación monetaria puede influir en ciertas operaciones, por ejemplo en el apartado de los traspasos.

Antes de conseguir un acuerdo que aumenta el potencial monetario, la entidad gallega estaba más que resignada a tener que vender a aquellos integrantes de la plantilla que garantizan hace caja. Sin embargo, el nuevo escenario del club blanquiazul permite retener a sus mejores hombres a pesar de la necesidad de tener liquidez, algo permanente en los últimos años.

El Deportivo comenzará la pretemporada mañana con el objetivo de conseguir la permanencia en Primera División sin tener que sufrir tanto como le sucedió en el pasado curso liguero, así como con el nombre de Álvaro García marcado en rojo para que pueda llegar a buen puerto el interés para que cambie el amarillo por el blanco porque, de alguna manera, seguiría siendo azul.

El jugador sigue de vacaciones después de una campaña muy larga entre la fase regular y el play-off, lo que le ha sucedido por segundo año consecutivo, por lo que a pesar de sus 24 años necesita descansar y desconectar para regresar con las pilas cargadas. La desconexión está siendo a medias porque sabe que está en la rampa de salida para ser traspasado y eso ocupa la cabeza a cualquier futbolista profesional. Lo seguro es que si no hay novedades, el extremo cadista estará el jueves de la semana próxima con el equipo amarillo en el arranque de la pretemporada, previsto para ese día.

Lo que suceda a partir de entonces es ahora mismo una incógnita porque se tienen que poner de acuerdo el club que lo pretenda y la entidad que cuenta con sus derechos federativos, el Cádiz. Mientras tanto Álvaro García estará a las órdenes del otro Álvaro, Cervera, que lo preparará para la nueva temporada sin saber si disfrutará de nuevo de sus prestaciones o si el mercado le llevará a otro destino.