La empresa municipal de la vivienda, Procasa, va a transformar cinco oficinas de su propiedad en otros tantos viviendas provisionales. Es la primera vez que el Ayuntamiento de Cádiz pone en marcha esta modalidad de vivienda, que tiene un carácter eminentemente social pues su uso se limitará a casos de emergencia habitacional con un tiempo de uso limitado.

Las dependencias, vacías desde que se construyeron hace quince años, se ubican en las entreplantas de edificios de viviendas municipales en calle Marqués de la Ensenada y en la avenida de la Constitución de 1812, en Varela.

En su día se proyectaron para ser utilizadas como oficinas, pero hay cinco módulos que siguen vacíos y que serán los que van a reacondicionarse para un nuevo uso.

Los locales, que actualmente están en bruto, ocupan superficies que van desde los 36 a los 62 metros cuadrados. Junto a una salida de luces a estas calles cuenta con ventanales que dan a los patios interiores de estas promociones.

Las oficinas se acondicionarán como si fueran lofts, lo que permite aprovechar mejor el espacio disponible. En todo caso hay que tener en cuenta que estas viviendas tienen un carácter de uso provisional destinado a personas con problemas de emergencia habitacional, un modelo del que actualmente no dispone la ciudad a pesar de los evidentes problemas de vivienda que tiene la ciudad.

Cuando en 1999 se puso en marcha el Plan de Rehabilitación del Casco Antiguo se plantearon promociones destinadas a realojos provisionales, para acelerar las obras, sin embargo operaciones como Matadero y algunas actuaciones en el barrio de Astilleros al final acabaron siendo permanente.