Expertos de la Policía Científica que estudiaron los cortes que hicieron las puñaladas en las ropas de la víctima explicaron ayer que se encontraron con tres heridas que fueron realizadas cuando la anciana se encontraba inmóvil: al hacer la prueba de colocarle las ropas a un maniquí, se ven superpuestos los cortes del cuchillo en las tres prendas que atravesó el arma (bata, camisón y sujetador). Hay más heridas, más cortes. Pero ya no aparecen superpuestos, lo que indica que la víctima se estaba moviendo.

Los peritos dijeron que no se ha podido determinar cuáles fueron las primeras heridas: si las que la víctima recibió cuando estaba inmóvil o las otras, que alcanzaron a la anciana cuando se estaba moviendo.

Saber cómo fue la secuencia permitiría adaptarla a una u otra versión sobre cómo fue la muerte de Dominga Ramírez. La fiscal y las acusaciones relatan en su escrito provisional que los acusados forcejearon con la anciana, la echaron sobre la cama y la apuñalaron mortalmente. En ese caso, queda por colocar en el relato las puñaladas que recibió cuando estaba inmóvil: si fueron las primeras o las últimas.

La defensa de los procesados sostiene que quien mató a Dominga Ramírez lo hizo por sorpresa: de ahí las puñaladas en las que está inmóvil que serían las primeras.

Las forenses y los expertos de la Policía Científica consideraron ayer compatible con las heridas un cuchillo recogido en la vivienda de la víctima veinte días después del crimen: según un familiar, faltaba uno como ese de un juego de tres que tenía la anciana.

El juicio continuará hoy con la audición de conversaciones grabadas durante la investigación, cuando estuvieron pinchados los teléfonos de una vecina de los procesados y de la víctima y el de los padres del acusado. El jurado también oirá la cinta en la que está grabado el soplo anónimo recibido por la Policía Local. La sesión terminará con la presentación de las calificaciones definitivas. Mañana, el juicio seguirá con los informes de la fiscal, las acusaciones y las defensas.