El verano que está a la vuelta de la esquina se presenta como el más importante para el desarrollo de las obras del puente de la Constitución de 1812. Si siempre ha sido una temporada esencial para el desarrollo de este proyecto, pues durante la misma es cuando más se puede avanzar gracias a la buena climatología, ahora lo es más porque la infraestructura encara ya su última fase de construcción y todo lo que se adelante de aquí al final del mes de septiembre permitirá fijar con bastante exactitud la fecha de apertura del segundo acceso a la capital.

Aunque Dragados, la adjudicataria de la obra, se había comprometido a presentar a lo largo del pasado mes de enero un calendario sobre el desarrollo de las obras aún pendientes, finalmente la constructora ha ido informando semana a semana de su planificación a Fomento. Fuentes cercanas al proyecto indicaron a este diario que durante este mes de mayo sí se podría contar con un calendario más completo, aunque se constata que será la evolución de los trabajos en los próximos meses los que marquen la posible fecha de conclusión del proyecto.

Hace ya unas semanas el Ministerio de Fomento trasladó a la alcaldesa, Teófila Martínez, la posibilidad de concluir las obras a lo largo del primer semestre de 2015, mencionando incluso el mes de marzo. Se lograría con ello tener el puente listo coincidiendo con las elecciones municipal de mayo, aunque la norma electoral impide actos oficiales en estas fechas por lo que sería necesario, si se quiere cortar la cinta, que estuviese terminado no más tarde del mes de marzo.

Aunque es cierto que el ritmo de los trabajos se ha ido incrementando de forma considera en los últimos meses, especialmente en el tramo atirantado, también es cierto que aún queda mucho por hacer, y muy delicado.

Fuentes de la obra indicaron esta semana a Diario de Cádiz que ya se han instalado 22 de las 60 dovelas, más la clave, que componen los 1.180 metros del tramo atirantado. La evolución casi semanal es evidente. Hay imágenes espectaculares que constatan el acercamiento de los tramos sobre los que se trabajan, cada vez más cercanos unos a unos con la inclinación, de vértigo en alguno de los lados, que acercan el tablero de la pila 12 (en alta mar) a la 11. A finales de esta semana comenzaron además los trabajos para el izado de otras dos dovelas.

Las mismas fuentes consultadas destacaron que la intención del Ministerio de Fomento y de Dragados es la de reforzar turnos de trabajo para, así, incrementar el ritmo de instalación de las dovelas. La instalación de los cuatro carros de izado permite desde hace unas semanas trabajas en las cuatro caras de las dos grandes pilares a la vez.

Fue en noviembre de 2012 cuando se izó la primera de las dovelas. Entonces se detectaron varios problemas técnicos en el ajuste de las piezas lo que provocó una ralentización de todo el proceso hasta solventar todas estas dificultades. Además, en esta fase sólo se podía actuar en la pila 13 pues la 12 aun estaba en construcción.

A la vez que se trabaja en el tramo atirantado, ya se están realizando también labores para preparar la instalación del tramo móvil, que se apoyará sobre los pilares 9 y 10 y que tiene una longitud de 150. Esta inmensa pieza está terminada desde hace ya meses y depositada en el Bajo de la Cabezuela. El proceso de instalación será especialmente delicado pues se necesitará una gabarra preparada para transportar este tramo del puente y una grúa capaz de elevarla hasta depositarla sobre los dos pilares que servirán de apoyo.

También han terminado los trabajos de limpieza de todo el terreno que va bajo los pilares de tierra en suelo de Cádiz y que, en su momento, serán ocupados por un nuevo paseo marítimo que unirá los ya existentes de Astilleros y La Paz. Es de suponer que a finales de verano podrían iniciarse los trabajos de construcción de la rotonda de acceso a la capital, que conectará con las avenidas de Las Cortes y de Huelva y modificará el diseño actual.