El tráfico portuario encadena en la Bahía de Cádiz dos años consecutivos de crecimiento. El aumento acumulado en el tráfico total general de mercancías alcanza en mayo el 2,82%, rozando los dos millones de toneladas.

Según la forma de presentación de la mercancía, la mercancía general mantiene la tendencia al alza de los últimos meses y anota un crecimiento del 89% hasta mayo, con un millón de toneladas movidas, frente a las 540.000 acumuladas en los primeros 5 meses de 2020.

Los graneles líquidos, con 468.000 toneladas, presentan una bajada del 35%; mientras el movimiento de graneles sólidos registra un descenso del 32% hasta mayo, con 381.000 toneladas acumuladas. En ambos casos, tanto en graneles líquidos como sólidos, se espera recuperar el nivel de tráfico a lo largo del ejercicio, a medida de la evolución de la pandemia se vaya reflejando en una recuperación económica y del comercio.

Si se atiende al modo de transporte, el tráfico de contenedores (lolo) mantiene también el ascenso de los últimos meses, alcanzando el 313% en número de contenedores (41.505 unidades), el 428% en teus (75.314) y el 332% en el caso de las toneladas, que llegan a las 663.680.

El tráfico rodado (ro-ro) , por su parte, decrece un 10% con 305.907 toneladas movidas en los primeros cinco meses del ejercicio.

Finalmente, el tráfico de cruceros mantiene el contador a cero, tanto en escalas como en pasajeros, ya que, como se sabe, se ha visto afectado por la prohibición de atracar este tipo de embarcaciones por la alerta sanitaria del covid.

Un espejismo pasajero

Era grato observar la presencia de un crucero turístico en el Muelle de Cádiz, pero no se trataba de una escala de las que el puerto está deseando recibir repleto de cruceristas. El ‘Crystal Serenity’ se fue este mismo lunes y permaneció en Cádiz dos días para recibir tripulación y abastecerse tanto de víveres como de combustible para cruzar el Atlántico e iniciar sus rutas por América.