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Cádiz

Un recorte premeditado y en mitad del curso escolar

  • Sólo en la provincia han cerrado dos centros de acogida y se han perdido varios empleos

El cierre del centro de acogida del Rebaño de María se produjo el pasado mes de marzo. En pleno curso escolar. Y sin posibilidad de negociación o de acercamiento alguna. Así lo denuncia la Plataforma Accampa (Asociación Andaluza de Centros Católicos de Ayuda al Menor), que además de la casa de la calle Costa Rica en Cádiz capital también sufrió el cierre del centro que las Hijas de la Caridad mantenían en El Puerto de Santa María. "No hubo posibilidad de nada. La Junta nos lo dio todo como hecho y no hemos podido variar ni negociar nada", expone una de las portavoces de Accampa, Amparo Cazorla. En total la cifra es de 271 plazas menos en acogida de menores en toda Andalucía, cuarenta de ellas en la provincia de Cádiz, lo que unido a la pérdida de puestos de trabajo aportará a la Junta un ahorro previsto de un millón de euros en Cádiz (entre seis y ocho millones en Andalucía, señalan desde Accampa).

El portavoz de Accampa en la provincia, Alberto García, expone que a ese profundo recorte han tenido que hacer frente los centros que sí siguen funcionando y atendiendo a estos menores, que además han sufrido una bajada de las ayudas recibidas de un 20%. "Estamos pasando apuros económicos", expone el portavoz, que añade que estos últimos meses han servido "para ir amainando el temporal que se nos vino encima" e intentar seguir adelante con la labor que desempeñan después de los cambios originados por la crisis económica.

No solo los educadores y otros trabajadores de estos centros de acogida han sufrido las consecuencias de la decisión tomada en febrero por la administración autonómica. Los propios menores han padecido en sus carnes estos hechos. No en vano, ha habido cierre de centros y traslados de menores incluso a otras localidades (como por ejemplo ha ocurrido con los chicos y chicas que estaban en el hogar Luisa de Marillac en el Puerto y que tuvieron que ir al Virgen del Mar que las mismas Hijas de la Caridad tienen en la calle Granja de San Ildefonso en la capital).

Sobre este asunto, Alberto García resalta que las órdenes religiosas están realizando un importante esfuerzo para que estos menores se vean lo menos afectados posible por estas circunstancias. Para ello, afirma que incluso se dan casos de pequeños que han mantenido su escolarización en el mismo centro educativo, costeando las órdenes religiosas los traslados diarios de una localidad a otra del menor.

Ante esta situación, el portavoz de Accampa asegura que los colectivos implicados en la protección del menor no arrojan la toalla. "Ni mucho menos", expone. De hecho, indica que los contactos y las reuniones siguen produciéndose, y que el Parlamento de Andalucía ha abordado ya algunos puntos en relación a este medida tomada el pasado mes de febrero. "La Protección de Menores hoy por hoy es un bloque", asegura Alberto García. Por tanto, se garantiza que desde diversos colectivos vinculados con esta labor de atención al menor se va a seguir peleando "aunque sea para frenar esta sangría que empezó hace ya dos años" "Al menos, que no vaya a más la cosa", expone García.

Conviene recordar que al cierre de plazas y de centros de acogida le ha acompañado, lógicamente, la pérdida de puestos de trabajo, que alcanzan la veintena en la provincia y que suman alrededor de 150 en toda Andalucía. Entre ellos, por ejemplo, las tres educadoras del antiguo centro de acogida de la calle Costa Rica que actualmente están realizando la labor de manera altruista.

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