L primer niño nacido en Cádiz en el nuevo siglo XX fue Federico Fernández de la Mota, que vio la luz a las 0.25 horas del día 1 de 1901, en la calle Diego Arias. A continuación, a las 0.30 horas, nació Francisca Varea Navarro en la calle Sopranis número 13. El nombre y domicilio de los demás nacidos el día 1 de enero de 1901 en nuestra ciudad son: Herminia Zamareño Jurado, Jabonería, 11; María Josefa Pedemonte Mericia, Pabellones de Asdrúbal; Manuel Domínguez, Casa de Maternidad; Francisco Alvarez Martínez, Hospital de Mujeres, 59; Jaime Paterson Jiménez, Santiago Terry, 1; Leonardo Campos Sánchez, Magdalena, 6; Jesusa Benjumeda, Robles, 3; Francisca Portela García, Consolación, 13; y María Teresa Rimada Martínez, Adolfo de Castro, 7. El Ayuntamiento, cumpliendo con lo acordado previamente, ha decidido repartir entre los familiares de estos niños que acrediten ser pobres la cantidad de mil pesetas. El reparto se efectuará dentro de unos días cuando se comprueben los datos económicos y de los natalicios.

El siglo XIX duró en Cádiz 25 minutos menos

En la noche del 31 de diciembre, todos los relojes de Cádiz tuvieron que ser adelantados veinticinco minutos para ajustar el horario con el meridiano de Greenwich. En la ciudad se seguía hasta entonces el horario del observatorio de San Fernando, cuyo meridiano pasa por debajo del sol 24 minutos y 49 segundos después que el británico. Con esta medida ordenada por el alcalde, Miguel de Aguirre, Cádiz tuvo la misma hora oficial que Madrid y otras capitales de España, que varios años antes habían ajustado su horario al de Greenwich. De todos modos, había pocos relojes particulares y los ciudadanos se regían por las campanas de las iglesias y las sirenas del dique y de la fábrica de tabacos.

Según un rotativo francés y las predicciones para el nuevo siglo realizadas por una famosa vidente: el siglo será fecundo en pacificaciones y prosperidades, los chinos volverán a producir nuevos estragos; en fin, habrá una inundación casi diluviana. Rusia será enormemente feliz; Inglaterra perderá territorio y dinero; en Alemania habrá revoluciones y desastres.