Movilidad urbana

El caso de la plaza de San Antonio, Veedor y las colas de coches

  • El cierre al tráfico de Veedor y de una parte de la plaza del Mentidero mejorará el acceso al colegio Carlos III

Colegio Carlos III.

Colegio Carlos III. / Fito Carreto

El atasco de tráfico que se produjo a media mañana del pasado miércoles y que colapsó el acceso al Campo del Sur durante unas dos horas, es el ejemplo de la limitación de espacio que tiene el casco histórico de la ciudad. Para que se produjera esta incidencia, que a las tres de la tarde ya se había solventado y que no se ha vuelto a repetir, se dieron tres causas.

Por una parte, la lluvia de la madrugada anterior y el inicio del día inestable animó a muchos residentes o turistas de otras localidades a aprovechar la jornada para visitar la capital, utilizando para ello el coche particular en su mayoría; después, el suelo mojado por la lluvia provocó varios accidentes de circulación, especialmente en el Campo del Sur, que desvió a los mismos a las escasas patrullas de la Policía Local que había de servicio, impidiendo su presencia en el cuello de botella que se crea en la entrada al Campo del Sur desde el frente de la Puerta de Tierra; y por último, se localizaron intentos de acceso a algunos aparcamientos en superficie, como en la Cuesta de las Calesas, en doble fila, impidiendo la circulación normal.

Para Martín Vila esta situación fue una situación puntual que, en todo caso, confirma la necesidad de un control más estricto del acceso del coche privado al casco histórico de la ciudad.

Junto a ello, el teniente de alcalde de Movilidad Urbana responde a las protestas por los problemas de tráfico que se están produciendo en la zona de San Antonio, tanto en la salida como en la entrada al aparcamiento y el cierre de la calle Veedor.

Esta semipeatonalización de esta vía se une a la que se producirá en un tramo entre Mentidero y el parque Genovés, para crear más espacio peatonal en el entorno del colegio Carlos III, donde apenas hay una acera muy estrecha donde deben circular decenas de niño en la entrada o salida del centro, lo que supone un evidente peligro ante la cercanía del tráfico rodado.

Todo ello ha motivado el desvío del tráfico por la calle Zaragoza, camino del Falla y la Alameda, lo apenas son unos metros mas de recorrido para el coche.

Tags

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios