La denuncia partió de Twitter. El usuario @elcabróndecai publicó en este red social una advertencia sobre la peligrosa moda que varios turistas estaban protagonizando en la Torre Tavira de Cádiz.

Hola @Torre_Tavira ¿no habría que controlar más a vuestros visitantes? No por ellos, sino por los que vamos por la calle y nos pueda caer un Instagramer carajote en el coco pic.twitter.com/R65nRPftuE

— El cabrón de Cai (@elcabrondecai) November 13, 2019

En el tuit se pueden ver las fotografías de algunos turistas sacando las piernas por fuera del pretil de la azotea desde donde se divisa la ciudad y que está situado a una altura de 45 metros en busca de la imagen perfecta para subir a Instagram. Desde la Torre han contestado al tuitero que denunció esta situación con otra entrada

Influencers del mundo: nos encanta que os fotografiéis en nuestra Torre, pero por favor, siempre con responsabilidad!! "No venirse arriba!" @elcabrondecai gracias por la denuncia permaneceremos aún más atentos de lo que ya estamos para que no ocurra ningún incidente. 😉

— Cámara Oscura (@Torre_Tavira) November 13, 2019

La gerencia de este enclave está pensando tomar algún tipo de medida como un cartel que prohiba esta práctica y defiende que vigilan constantemente los espacios de la torre, además, aclara que la imagen del perro (Pipper, un can influencer que recorre el mundo) no se corresponde con esta denuncia porque estaba atado y vigilado de cerca por su dueño.