Algunos restos que han aparecido en el Portillo. Llaman la atención el cadáver infantil y otro sedente (a la derecha)

Hace más de cuatro años que cerró sus puertas. El proyecto de demolición y construcción del nuevo edificio ha pasado numerosas vicisitudes. Y finalmente, parece que el pabellón Fernando Portillo ya está completamente listo para retomar las obras, esta vez con el ritmo inicialmente previsto. La empresa constructora, Inmobiliaria Reiné, ha entregado ya a la Junta de Andalucía el informe sobre la intervención realizada en los restos arqueológicos.

Estos trabajos de arqueología han sido bastante intensos (desde enero hasta agosto de este año) y ha arrojado muchos datos destacados. El informe especifica que se ha excavado sobre los 3.708 metros cuadrados de superficie -el 100%- y a una profundidad de tres metros y medio.

Gracias a estos trabajos, hay constancia de la presencia de restos de varios momentos históricos bien diferenciados, como niveles prehistóricos "adscribibles al Paleolítico Medio", la época feno-púnica (con restos del siglo V a.C.), la época romana tardorrepublicana (desde el siglo II a.C. hasta el cambio de era), la época romana altoimperial (del siglo I a.C. a la segunda mitad del I d.C.) y la romana bajoimperial (con restos del siglo V d.C.).

De todas estas épocas, la romana es la que más destaca entre los restos encontrados. Nada menos que 176 enterramientos han sido localizados, 23 de ellos infantiles. Y de ellos, 130 son inhumaciones y 46 incineraciones y cremaciones. Lo más destacado en este apartado de restos arqueológicos es la inhumación de un difunto que se encuentra sentado, "con las rodillas flexionadas y la espalda con una inclinación de 90º", especifica el informe. Se trata de la primera vez que aparece un cuerpo así en la ciudad de Cádiz.

Junto a los restos, han aparecido también numerosos objetos propios de una necrópolis. Así, han aparecido tanto elementos de uso personal que acompañaban al difunto (objetos de tocador como agujas de vidrio y hueso, espejos de bronce, amuletos o colgantes de cerámica) como ungüentarios de cerámica o askoi, lucernas de disco y volutas.

Con todos estos hallazgos, los miembros del equipo de excavación indican en su informe que se está realizando una memoria para establecer un análisis exhaustivo de los restos a fin de definir qué usos ha tenido el solar e intentar profundizar sobre la organización de la necrópolis gaditana, a partir de las estructuras funerarias.

Pero de manera paralela a estas excavaciones arqueológicas -y a la espera de que la Junta de Andalucía emita su visto bueno al trabajo realizado-, la obra también ha dado importantes avances en los últimos meses. Así, desde el Ayuntamiento (promotor de este proyecto) se anuncia que ya ha finalizado la construcción del muro de pantalla, que se entiende como proceso más complicado dentro del proyecto total.

A día de hoy, la obra se encuentra a un 10% de su ejecución, que superaría el 20% en el caso del subterráneo. En este sentido, teniendo en cuenta precedentes como el de Canalejas, conviene señalar que una vez terminado el muro de pantalla, el proceso de construcción es mucho más ágil en el tiempo.

El próximo paso es el movimiento de tierras, para vaciar toda la parte interior de ese muro construido, que dará cabida al futuro aparcamiento. Y desde ese momento, la previsión municipal es que la obra recupere el ritmo que se había establecido en los inicios de este proyecto, que dará como resultado un nuevo pabellón polideportivo en la ciudad (que se une a los del casco histórico, Mirandilla, Náutico, Ciudad de Cádiz o Francisco Blanca, en el caso de las instalaciones municipales) con piscina terapéutica, tres salas para la práctica de gimnasia, una pista deportiva y más de 500 metros cuadrados para otros deportes; un aparcamiento para 400 plazas y un edificio de cuatro plantas de altura y fachada acristalada en el que se albergarán locales comerciales relacionados con el deporte.