Las personas que formalizan su declaración de Voluntad Vital Anticipada en el Hospital Puerta del Mar son principalmente mujeres y el tratamiento que más solicitan es la sedación paliativa, rechazando generalmente que se prolongue la vida de forma artificial.

Estas son algunas conclusiones de la tesis doctoral Contenido de las declaraciones de las Voluntades Vitales Anticipadas en el Hospital Universitario Puerta del Mar de Cádiz y conocimientos y actitudes de los profesionales sanitarios de los servicios implicados en el final de la vida, de la antropóloga y enfermera Pepa Cabeza de Vaca Pedrosa, responsable del Registro de Voluntades Vitales Anticipadas del hospital gaditano. Pepa Cabeza de Vaca leyó su tesis recientemente en la Facultad de Medicina, obteniendo un sobresaliente cum laude.

Pepa Cabeza de Vaca explica que la Declaración de Voluntad Vital Anticipada en Andalucía "es la manifestación escrita, hecha para ser incorporada al Registro de Voluntades Vitales Anticipadas, por una persona capaz que, consciente y libremente, expresa las opciones e instrucciones que deben respetarse en la atención sanitaria que reciba en el caso de que concurran circunstancias clínicas en las cuales no pueda expresar personalmente su voluntad".

Para realizar su trabajo, recogió datos tanto de ciudadanos como de profesionales de distintas unidades del Hospital Puerta del Mar entre noviembre de 2013 y mayo de 2016. Así, analizó las 414 voluntades inscritas en el centro desde que se empezaron a registrar en noviembre de 2013 hasta diciembre de 2015 y, por otro lado, pasó un cuestionario a médicos y enfermeros de las diez unidades más vinculadas al final de la vida: Cardiología, Digestivo, Hematología, Medicina Interna (que incluye Cuidados Paliativos), Nefrología, Neumología, Neurología, Oncología, UCI y Urgencias.

La tesis partía de la hipótesis de que el contenido de las Voluntades Vitales Anticipadas inscritas en el Registro del Hospital Puerta del Mar y los conocimientos y las actitudes de los profesionales sanitarios de los servicios implicados en el proceso del final de la vida favorecen que los ciudadanos que han realizado voluntades anticipadas tengan una muerte digna, porque indican en un porcentaje alto que quieren recibir sedación paliativa y no desean recibir medidas de soporte vital.

Según cuenta Pepa Cabeza de Vaca, el objetivo era analizar el contenido de los documentos de las Voluntades Vitales Anticipadas inscritos en el Registro del centro entre noviembre del 2013 y diciembre del 2015, así como conocer el grado de conocimiento y las actitudes de los profesionales sanitarios de los servicios implicados en el proceso del final de la vida, para ver si se corrobora su hipótesis.

Respecto al análisis de los documentos, la tesis concluye que las personas que con mayor frecuencia formalizan su declaración de Voluntad Anticipada tienen una edad media de 55 años y son predominantemente mujeres. En cuanto al contenido de los escritos, en su apartado Indicaciones Sanitarias, "da respuesta a lo que se entiende entre la mayoría de la población que es no tener dolor ni sufrimiento y que no se prolongue la vida de forma artificial", ya que el tratamiento más aceptado por los ciudadanos es la sedación paliativa y los que más rechazan son la reanimación cardiopulmonar y el respirador artificial.

De las conclusiones a las que ha llegado tras analizar los cuestionarios de los profesionales, la autora destaca que en los servicios estudiados "no existen diferencias significativas en la autovaloración de los conocimiento y actitudes de los profesionales", y señala que la mayoría de los encuestados indicaron que respetarían los deseos expresados por sus pacientes en el documento de Voluntades Anticipadas.

Por todo ello, Pepa Cabeza de Vaca afirma que se puede concluir que "los profesionales del Hospital Universitario Puerta del Mar, tanto por el contenido de los documentos de Voluntades Vitales Anticipadas inscritos en su Registro, como por los conocimientos y actitudes de sus profesionales, se encuentran en condiciones de garantizar a estos ciudadanos el cumplimiento de dicho documento y por tanto una muerte digna".

Parte de la tesis ha sido publicada en la revista Nutrición hospitalaria y su autora ha presentado comunicaciones en varios congresos.