Un estadio no se hace de la noche a la mañana. Un estadio encima de otro, menos aún. Han sido años de obras, de obstáculos, de proyectos fallidos, de enfrentamientos entre las diferentes administraciones. Sin embargo, todo llega, lo bueno y lo malo. Lo malo ha sido ver cómo el Cádiz no era capaz de salir del pozo tampoco este año. Lo bueno, comprobar que el nuevo estadio Ramón de Carranza se estrenará este próximo miércoles a las nueve de la noche con un partido amistoso de las selecciones olímpicas de España y México, lo que permitirá disfrutar de unas instalaciones municipales que han supuesto una inversión de 68 millones de euros financiados con la venta de los locales comerciales que se han generado. Previamente, los gaditanos podrán disfrutar de la nueva Tribuna del estadio con unas jornadas de puertas abiertas que se celebrarán mañana martes a partir de las 11 horas y que permitirán a los visitantes ver cómo ha quedado esta emblemática obra. Quienes quieran hacer el recorrido por las instalaciones podrán hacerlo hasta las 20 horas de ese día.

El Estadio se ha renovado en su totalidad a través de tres fases, que comenzaron a ejecutarse en marzo de 2003 con el derribo de la grada de Fondo Sur. Para que las obras llegaran a buen puerto se ha contado en todas ellas con la colaboración del Consorcio de la Zona Franca, que ha participado con la compra de superficie (locales comerciales, oficinas y aparcamientos) para pasar después a comercializarlo. La dirección de obra en las tres fases ha corrido a cargo de la Oficina Técnica Municipal y la empresa constructora ha sido Fomento de Construcciones y Contratas (FCC).

La última fase que se ha desarrollado es la de la Tribuna, que cuenta con varias peculiaridades. En primer lugar, tiene una visera que no tiene pilares intermedios y está sujeta por los dos extremos a lo ancho de la grada, así como cuenta con una sola viga de 110 metros de largo y nueve metros de canto. Este hecho ha supuesto una continua supervisión de las obras por parte de los técnicos municipales, así como un notable esfuerzo por parte de los operarios. Asimismo, con las obras de esta última fase se ha posibilitado la conexión entre el Estadio y la avenida Cayetano del Toro a través de una pasarela que está prácticamente finalizada y que liberará los accesos y hará más fácil la entrada y salida del público al nuevo Estadio Carranza. Esta novedad urbanística también va a posibilitar que se mejore la urbanización de la Plaza de Madrid, convertida durante años en aparcamientos, que no facilitaban el esparcimiento de los residentes en la zona.

La nueva Tribuna, que podrán ver los gaditanos durante toda la jornada de mañana cuenta también con más de 28.000 metros cuadrados destinados a uso hotelero, aprovechando las dos torres laterales con una altura de ocho plantas y que estarán unidas a través de un largo pasillo que recorre esta grada por su planta más alta.

Esta última fase ha supuesto una inversión de 26 millones de euros, que han posibilitado que se culmine un edificio emblemático para la ciudad, que se encuentra localizado en un punto intermedio entre las principales avenidas de acceso a Cádiz (Cayetano del Toro y Juan Carlos I) y que es referente en su uso polivalente, ya que permite ser el estadio que acoge los partidos del equipo de la ciudad, a la vez que en los bajos se encuentran los juzgados que había en la antigua Cárcel Real o tiene cabida para oficinas privadas.