El puerto de la Bahía de Cádiz ha movido hasta el mes de noviembre 3,73 millones de toneladas de mercancías, 83.000 menos (-2 por ciento) que en el mismo periodo de 2017, pese al descenso de 136.000 toneladas del tráfico de la línea de MSC.

El tipo de mercancía que más ha crecido han sido los graneles líquidos, que con una subida del 15,73 por ciento llega a las 628.803 toneladas. Le siguen los graneles sólidos, que aumentan un 2,74 por ciento frente a noviembre de 2017 y alcanzan 1,648 millones de toneladas. En este grupo destacan los cereales y harinas, con más de 820.000 toneladas y un ascenso del 36 por ciento.

La mercancía general, asociada al tráfico de MSC (contenedor lolo), decrece un 11,96 por ciento y acumula 1,29 millones de toneladas. 

Respecto a la forma de transporte de la mercancía, el tráfico rodado se ha visto incrementado en un 5,33 por ciento respecto a 2017, sumando 839.100 toneladas. Como se sabe, este tráfico corresponde íntegramente a la línea regular que mantiene Trasmediterránea entre Cádiz y Canarias, que incluye, además, tráfico de contenedor lolo, que también ha crecido un 8 por ciento hasta noviembre, acumulando 148.679 toneladas y 26.204 teus. En total (roro+lolo), el tráfico entre Cádiz y Canarias suma 987.779 toneladas.

El contenedor (lolo), por su parte, y pese al ascenso anotado por la línea de Trasmediterránea, desciende un 28 por ciento debido, como se apuntaba anteriormente, a la bajada de tráfico de la línea de MSC.

Por otro lado, la pesca fresca acumula hasta noviembre una subida del 8,69 por ciento en el volumen de mercancías, con 16.636 toneladas, que alcanzaron un valor en venta de 39 millones de euros, un 0,19 por ciento más que en 2017.

Finalmente, el tráfico de cruceros, como se adelantó hace unos días, registró hasta noviembre la cifra récord de 306 escalas y 401.840 pasajeros, lo que supone además un incremento del 12 y 11 por ciento, respectivamente.