El Consorcio del Bicentenario pasó a la historia el pasado mes de marzo. Se cerraron las cuentas y se dejaron libres las últimas oficinas ocupadas, ya en la Zona Franca. Sin embargo, ocho meses más tarde tres de las firmas que habían firmado acuerdos de apoyo financiero a este evento aún no han pagado todo el dinero que se habían comprometido a abonar.

Según los datos obtenidos por este diario, en total se adeuda 1.136.000 euros procedentes de dos entidades de carácter privado y una institución pública. Dos de ellas tienen pendientes de pago medio millones de euros cada una, mientras que el resto corresponde a una empresa que actualmente se encuentra en suspensión de pagos.

Una vez que el Consorcio dejó de funcionar, la recuperación de esta cantidad está en manos del Ministerio de Hacienda.

La previsión es que todo el dinero se pueda recuperar en las próximas semanas, al fin y al cabo todas las firmas implicadas rubricaron en su día contratos asumiendo estos pagos. En todo caso, se destaca que la gestión del Consorcio del Bicentenario se ha cerrado, contando con esta aportación, sin déficit alguno. El dinero debido servirá para pagar a la Universidad de Cádiz y a la Administración General del Estado por cuanto todas las empresas privadas que en su día realizaron trabajos para el Consorcio están al día en sus cobros y no se les debe ni un céntimo.

La sociedad pública se encontró en su última etapa con un déficit de 800.000 euros, que se logró sufragar con nuevos contratos de patrocinio hasta el punto de obtener fondos extras que, en la medida de lo posible, permitieron ampliar la programación de los actos desarrollados a lo largo del 2012.

Lo cierto es que el Consorcio siempre se vio corto de fondos para sacar adelante un programa adecuado para el evento debido a las escasas aportaciones de los patrocinadores privados y, también, el escaso dinero dado por algunas instituciones públicas.