Hace años que el historiador gaditano Juan Antonio Fierro anda dándole vueltas a la cabeza con una de sus ideas: levantar en algún lugar de la Caleta un monumento que rinda homenaje al pescador caletero, una estatua que perpetúe una imagen que, en muchos aspectos, se está perdiendo y que de alguna manera forma parte de la historia de este rincón tan gaditano. Su idea, su proyecto, ha sido recogido ahora por el Grupo Municipal Socialista, a través del concejal Javier Ramírez, y será llevado al Pleno de mañana como propuesta formal para que esta playa recuerde la estampa de sus pescadores, aquellos que, como reflejaba el pasodoble de Pedro Romero a Pericón de Cádiz en su comparsa ‘Pregones’, cruzaban la Viña con su caña a cuestas y su cesto como tradición y, también, como medio de subsistencia.

Para Juan Antonio Fierro, Cádiz tiene una especie de deuda con sus pescadores y con su memoria, con sus artilugios de pesca perdidos hoy en gran parte y con esa íntima relación del viñero con su playa y con el arte de pescar: “Se trataría de un personaje vestido de forma del pescador de la zona, y más concretamente de la playa de la Caleta, con objetos y útiles ya en desuso, como la caña del país, hoy sustituida por otros modelos como la de fibra, la canasta, el aparejo , la viyuela, camaronera, garabato, mocafre...”.

Durante varios años, Fierro ha ido asentando la idea, que compartió con algunos amigos, e incluso el arquitecto José María Esteban le hizo dos dibujos, dos bocetos, de la posible escultura del pescador caletero.

La idea, finalmente, será llevada a Pleno por el Grupo Municipal Socialista gracias al interés mostrado por el edil Javier Ramírez, quien destaca que, a su juicio, la propuesta “trasciende lo estético”, aunque pueda servir para embellecer esta zona de la ciudad, para convertirse en “un homenaje” a una de las figuras más típicas de Cádiz, la del pescador caletero, el mariscador y, con él, todos los útiles que han ido cayendo en desuso con el tiempo y que esta estatua pretende dejar fijado más allá de lo que pudiera ser un simple recuerdo o se guarde en la memoria de los más viejos del lugar. A juicio de Ramírez, la escultura aumentaría también el ya de por sí potente atractivo turístico de la zona.

El proyecto de Juan Antonio Fierro, que ha representado en un boceto a pequeña escala Antonio Arufe con quien el historiador ya trabajó en un asunto relacionado con el Cristo del Perdón, recoge la instalación de una estatua de cierta altura que pudiera contener una fuente para beber e, incluso, un reloj solar, y que se puede rodear con alguna estructura circular de bancos en los que la gente pudiera sentarse.

Y sobre la ubicación, Juan Antonio Fierro propone la explanada de la Caleta situada frente a la Escuela de Náuticas. En su proyecto se recoge también la idea de desplazar unos metros la escultura que se encuentra en la zona.