El desalojo de la Asociación de Autoayuda e Información sobre el Síndrome de Dependencia Alcohólica (ARCA) de las dependencias municipales que ocupa en los bajos de Telegrafía sin Hilos acabará en sede judicial tras el anuncio de esta entidad de no moverse de esta lugar.

A preguntas de los medios, el alcalde de Cádiz, José María González, fue bastante explícito al indicar que "serán los tribunales los que tendrán que hablar" sobre este asunto para finalizar con la disputa que mantienen ARCA y el Ayuntamiento.

González espera a que se dictamine una resolución para que abandone su sede

González no dejó lugar a la duda al insistir en su escueta respuesta en que "si ellos -por la asociación- van a esperar a que llegue una resolución judicial para abandonar el espacio, esperaremos a que llegue para que lo abandonen".

La semana pasada, ARCA recibió una notificación por parte del Ayuntamiento en la que se le daba un plazo máximo de 15 días para el desalojo de las instalaciones de propiedad municipal que se encuentran en la calle Conil de la Frontera y que llevan ocupando desde el año 2010.

El motivo que se esgrimió desde el Consistorio es que el convenio de colaboración entre las dos partes expiró en el año 2015, por lo que el uso de este local, con una superficie de 190 metros cuadrados, se estaba realizando en precario.

Como alternativa, se ha ofrecido a la asociación dos salas. Sin embargo, Pedro Reyes, presidente de esta entidad, no ha aceptado la permuta de las instalaciones al no poder acoger la actividad que actualmente presta ARCA en Telegrafía.

Cabe recordar que en la actualidad el responsable de esta asociación también vive en este local al no poder afrontar el pago del alquiler de una vivienda al disponer únicamente como ingreso de una pensión no contributiva de unos 300 euros mensuales.