La fiscal mantuvo ayer su petición de 24 años de prisión para David Rincón, quien ha reconocido en el juicio que la madrugada del 5 de julio de 2010 mató a su vecina Mercedes Tello. No ahorró adjetivos en su alegato: "La apuñalaron por delante y por detrás, con un cuchillo que ya llevaban y con otro que cogieron en la casa. Fue una situación dantesca. Le dieron cincuenta puñaladas. No cejaron hasta que la vieron muerta. Fue un asesinato brutal y a sangre fría", dijo la representante de la Fiscalía. La defensa admitió que hubo un asesinato. No intentó lograr una condena por homicidio, menos penado. Pero no dejó de matizar las palabras de la fiscal. "Un asesinato siempre es brutal", replicó el letrado.

Sí planteó la defensa de David Rincón, quien al término del juicio pidió perdón a la familia de la víctima, que no hay prueba alguna de que Mercedes Tello fuese asesinada con ensañamiento. La mujer recibió numerosas puñaladas en su vivienda de la calle Cal y Canto, en el barrio de Guillén Moreno, cuando se despertó y sorprendió allí a su vecino David Rincón y a J.R., que habían entrado a robar. J.R. no se ha sentado en el banquillo: padece una enfermedad grave y está incapacitado para ser enjuiciado.

Que hubo ensañamiento lo sostiene la acusación particular, ejercida por la familia de la víctima, que también califica los hechos como un asesinato y solicita 30 años de cárcel para David Rincón. El abogado de la familia de Mercedes Tello recordó que la mujer recibió cuarenta o cincuenta puñaladas. "Se ensañaron. Fue un ensañamiento manifiesto. No hacía falta darle tantas puñaladas. Ha quedado acreditado que tuvieron voluntad de añadir unos daños o unos males innecesarios", afirmó el letrado.

El abogado de la acusación particular explicó que a la familia de la víctima no le mueve el ánimo de venganza . "Pero sí pedimos a su señoría", agregó, "que no le tiemble el pulso al imponer la máxima pena posible".

El letrado dijo que por fin la familia va a terminar el duelo por la muerte de Mercedes Tello. Y recordó que el sufrimiento añadido que soportaron los familiares. Por ejemplo, un marido que además de ver a su esposa apuñalada tuvo que enfrentarse en ese momento a una situación en la que debía demostrar su inocencia.

El abogado pidió al tribunal que no admita ninguna atenuante al condenar el asesinato de Mercedes Tello. Ni de drogadicción ni ninguna otra.

Precisamente la defensa de David Rincón, aceptado el delito de asesinato, se propuso ayer convencer al tribunal de que sí concurre una eximente incompleta o al menos una atenuante de anomalía psíquica. Apeló el abogado a la existencia de un diagnóstico de trastorno antisocial de personalidad en el informe médico forense sobre David Rincón.

La defensa de Rincón adujo, con referencia a una sentencia del Tribunal Supremo, que si el trastorno antisocial va unido al consumo de drogas, es posible aplicar una eximente incompleta. "Sólo en un contexto de trastorno antisocial este letrado puede entender lo que ocurrió", argumentó el abogado defensor. El consumo de drogas (cocaína y cannabis), añadió, está acreditado por el análisis de pelo, por un informe de Cruz Roja que habla de criterios clínicos de dependencia y por testimonios de testigos que sitúan al joven siempre acompañado de personas enganchadas.

La fiscal y la acusación particular coincidieron en señalar que no basta la mera condición de drogodependiente para conseguir una atenuante o una eximente de drogradicción.

La fiscal mantuvo su petición de tres años de cárcel para el otro acusado que se sienta en el banquillo, J.J.M., a quien ubica como vigilante en el portal de la víctima mientras los otros dos robaban pero desconocedor del crimen. El abogado defensor de ese procesado reclamó la absolución. También ha sido un perjudicado porque no hay prueba objetiva alguna contra él, argumentó.