El Ayuntamiento ya está preparando la que será la cuarta fase de programa de viviendas para jóvenes, según explicó ayer la alcaldesa, Teófila Martínez, durante la entrega de ocho de estos pisos. La primera edil indicó que ya se habían adjudicado 150 de estas viviendas y que la intención municipal era alcanzar las 400 ó 500, "según disponibilidad", antes de que terminara el presente mandato municipal, esto es, antes de 2011.

Según explicó el teniente de alcaldesa delegado de Vivienda, Juan José Ortiz, actualmente se está elaborando y valorando el listado de fincas del casco histórico donde podrían ubicarse esas cuarenta viviendas, por lo que la intención es abrir el plazo de solicitud en uno o dos meses.

La iniciativa municipal se nutre de fincas conseguidas, mayoritariamente, por el sistema de expropiación, y siempre están situadas en intramuros porque la idea municipal es rejuvenecer la población de esta zona de la ciudad.

Este programa está destinado a gaditanos de hasta 35 años de edad, con rentas limitadas. Durante los cinco primeros años ocupan las viviendas como inquilinos y pasado este tiempo se les ofrece la posibilidad de adquirir las casas, descontándoles todo lo que hayan pagado hasta entonces en concepto de renta.

Esta fórmula, según apuntó la alcaldesa, es "made in Cádiz", puesto que las comunidades madrileña y andaluza crearon fórmulas similares pero sólo descuentan a los jóvenes el 50% del alquiler pagado hasta el momento de la adquisición.

La alcaldesa también destacó que estas viviendas se construyen con fondos municipales, sin aportaciones de otras administraciones, y criticó que no se haya firmado un nuevo convenio de vivienda "porque así lo decidió la Junta por decreto".

En presencia del representante vecinal de barrio de La Viña, José Lado, la alcaldesa fue entregando las llaves de los ocho pisos de Ángel, 8, mientras que en el patio del único piso de la planta baja se sucedían las escenas de alegría. Ya arriba, en las viviendas, los jóvenes veían los resultados de años de espera. Algunos de ellos habían sido agraciados en el primer sorteo, celebrado el 22 de marzo de 2005 y otros en el segundo, en marzo de 2006. La espera ya ha quedado en el recuerdo. En el segundo A, José descorchaba una botella de cava mientras que Patricia sostenía en brazos al hijo de ambos. Actualmente viven en la calle Pasquín, en un piso de alquiler demasiado pequeño y caro. Ahora tendrán un alquiler accesible en una casa nueva, con tres dormitorios, a donde están deseando mudarse lo antes posible.

Su vecina de planta, Patricia, de 31 años, se mudará a su casa con su pareja; ahora vive con sus padres en La Viña. Su piso también tiene tres dormitorios y supone una oportunidad de fundar una familia, prácticamente la única: cree que le ha tocado la "lotería" con un día de retraso porque difícilmente podría haber accedido al mercado libre de vivienda.

A Yolanda, de 31 años, le ha tocado el soleado ático de dos dormitorios que tras una reforma tendrá terraza privada. Irá sola a la casa de la calle Ángel, a una vivienda que le permitirá emanciparse, puesto que ahora vive en la casa familiar con su madre y con una hermana.