El relevo en la dirección de las empresas municipales no podrá ser tan inmediato como a los dirigentes de Por Cádiz Sí se Puede les gustaría. Hasta la fecha, cada vez que José María González o concejales como David Navarro han solicitado información de empresas como Cádiz Conecta o Onda Cádiz se han topado con un muro en forma del personal de confianza colocado por el anterior equipo de Gobierno. Estas personas tienen en vigor contratos de alta dirección y cuentan con poderes por la marcha de los consejeros delegados, pertenecientes al PP. Ese proceso de transición no será tan rápido y la negociación para decidir quienes forman parte de esos consejos de administración es otro de los puntos que está frenando el pleno de organización de hoy. Salvo en el consejo de Onda Cádiz, donde por Ley debe haber representación de todos los grupos municipales, hasta ahora en los demás se mantenía el principio de proporcionalidad. De las nueve personas que los solían formar, un tercio eran concejales del PP y los restantes funcionarios municipales de las diferentes áreas. Lo que pretende el alcalde y su equipo es tener mayoría en esos consejos, pero la oposición quiere que de los tres concejales uno sea de cada partido: PP, PSOE y PCSSP. El problema será que antes los funcionarios tenían claro que lo normal era votar lo mismo que los concejales. Ahora su voto será una incógnita.

El Ayuntamiento de Cádiz cuenta con ocho empresas municipales: Onda Cádiz, Cádiz Conecta, Cádiz 2012, Palacio de Congresos, Procasa, Eléctrica de Cádiz, Aguas de Cádiz y Emasa. Tampoco se puede olvidar el problema de cómo cambiar a los directores de algunas de esas empresas, que tienen contratos de alta dirección, por lo que deben ser preavisados con tres meses de antelación de que deben abandonar sus puestos. Además, su indemnización es de tres meses de su sueldo. Por más que hayan podido estar ocho años en el cargo. Sus cargos además no podrán ser ocupados por designación libre, sino que tendrán que convocarse unas plazas públicas y los elegidos tendrán que contar con la mayoría del consejo de administración de cada empresa.

Así las cosas, y atendiendo la cantidad de problemas que está teniendo el alcalde para sacar adelante el pleno de organización, todo hace prever que el tránsito en las empresas municipales será mucho más lento de lo previsto.