La alcaldesa lo sabía, seguramente, y también el jurado que concedió a Plácido Domingo el Premio Cortes de Cádiz de la Música 2014. Seguro que sabían que el tenor y barítono español más universal aceptaría sin dudar este reconocimiento de la "Tacita de Plata maravillosa" como él mismo definió a la ciudad que ayer le entregó ese galardón. En su intervención en la Casa de Iberoamérica, conocida como Cárcel Vieja por el pueblo, el cantante y director de orquesta desgranó en tres razones el porqué este premio (que su presencia "contribuye a prestigiar" según Teófila Martínez) tiene un significado "muy especial".

Y dijo Plácido Domingo como primera razón esa gran verdad, que estamos en la cuna de Falla "uno de los grandes compositores españoles universales, tan sensible". Y mencionó en segundo lugar que esta ocasión en cierta forma "funde la gallardía de Cádiz con la galanura de Iberoamérica", y recordó que la primera ciudad que él pisó en su segunda patria, México, fue Veracruz, hermanada con Cádiz, donde conoció a su mujer, y recorrió con sus palabras tantas ciudades ligadas con la Tacita, Cartagena, La Habana... "Sabéis de mi extraordinaria relación con México -dijo el cantante- y por eso valoro tanto este premio que me vincula aún más con Hispanoamérica".

Y como tercera razón recitó  Domingo el hecho de que este premio tenga como argumento la conmemoración de la Constitución de 1812, "la primera democrática de nuestro país y una de las más liberales de su época, al proclamar una Monarquía constitucional y reconocer la separación de poderes, la libertad de prensa". Aquí el tenor bajó al tiempo presente para reconocer que "no vivimos tiempos fáciles, pero debemos hacernos fuertes con el arrojo, la sensibilidad y por qué no con la gracia que caracteriza a esta tierra".

Tal vez por todo eso, en el pequeño acto privado que tuvieron el cantante y la alcaldesa en el Ayuntamiento, Teófila regaló a Plácido Domingo una edición de la Constitución mexicana de Veracruz, inspirada en la de Cádiz, y tal vez por eso al tenor le agradó tanto el obsequio.

En su discurso de recepción del galardón, Domingo hizo múltiples referencias a Cádiz y la música como importantes en su trayectoria vital. Y recordó que cuando empezó a estudiar piano, antes de su carrera como cantante, interpretaba entre otras piezas de la suite Iberia de Albéniz, las tituladas Cádiz y Rumores de la Caleta. Y también cómo sus padres, afamados cantantes de zarzuela, tenían en su repertorio Cádiz, de Chueca, y su famosa Marcha, sí, esa que suena dos veces todos los días en la plaza de San Juan de Dios acompañando el baile de los surtidores en la fuente.

A pesar de todo eso, esta era sólo la segunda vez que Plácido Domingo visitaba Cádiz, cosa que prometió remediar pronto con otra estancia, aunque sin precisara cuándo, porque el tenor siguió encontrando lazos que desconocía en esta ciudad: "Me ha llenado de alegría contemplar desde su despacho la maravillosa capilla del Ayuntamiento, que guarda precisamente una imagen de la Virgen de Guadalupe, otra vinculación más con México". Y el cantante, que no cantó pero escuchó música interpretada por gaditanos, evocó la cercanía "a pesar del océano tan enorme que tenemos en medio", y que "es en realidad un paso hacia América". 

"Soy español, pero mucho más que otros -dijo como resumen de su persona- porque como sabéis nací en Madrid, y cuando mis padres partieron hacia México me hicieron mexicano, pero cuando yo pude elegir mi nacionalidad, volví a hacerme español"."Que esta unión siga existiendo por los siglos de los siglos" concluyó antes de reiterar su agradecimiento y hacer esa promesa de su vuelta, al tiempo que escuchaba un sonoro aplauso, casi tan largo como los miles de ovaciones que ha recibido en su carrera.

La alcaldesa gaditana, Teófila Martínez, tuvo la misión de responder o más bien complementar el discurso del artista universal, y le expresó su sincero deseo de que "aquí, en la cuna de la libertad, te encuentres, amigo Plácido, como en tu propia casa". Y la casa que dibujó la primera edil aúna su riqueza cultural propia con su enclave europeo, y sobre todo, con "la huella iberoamerican". "No podemos desaprovechar -advirtió- la fuerza que suponen 650 millones de hombres y mujeres que aportan grandes cosas al mundo, su equilibrio, su sensibilidad y que se entienden en el mismo idioma".

Dijo la alcaldesa que Cádiz es una ciudad que "ama la música de la manera que la aman los pueblos a los que se le da de manera natural". Y añadió que el de ayer era un día muy importante para esta ciudad, porque "hacemos entrega de este galardón a uno de nuestros mejores embajadores en el mundo", que es "un ejemplo de transmisión de valores, porque entendió siempre la música como un bien común que debía llegar a todos". Y alabó de él que "siga rompiendo barreras entre la música clásica y la popular, demostrando así el poder de la música para unir a la gente, como algo que trasciende y que tiene una fuerza incontenible".

"Hoy contamos con uno de los más grandes -concluyó la regidora-, y hoy Cádiz, que ama la música, quiere ofrecerle su más importante galardón como homenaje y reconocimiento, y pedirle que no nos olvide". Y luego, tras entregarle una edición de la zarzuela Cádiz encuadernada especialmente para esta ocasión en el prestigioso taller de los Hermanos Galván, política y cantante intercambiaron palabras al oído antes de que el artista con planta de galán besara la mano de la alcaldesa.