Los problemas y las deficiencias en el servicio de socorrismo y salvamento de las playas de Cádiz volvieron a reproducirse durante el pasado fin de semana, el último de la temporada media, en el que se registró una notable afluencia de público. En esta ocasión, se repitió la denuncia sobre la situación de los motores de las embarcaciones para realizar actuaciones en el mar, ya que la encargada de prestar el servicio en la zona de Los Delfines no pudo salir a navegar al estar su motor averiado.

Esta situación, tal y como explicaron ayer desde el comité de empresa de esta prestación que realiza la empresa Ebone, se acrecentó por el hecho de no contar con motores de reserva o de respeto para que "en caso de avería el servicio pueda seguir funcionando".

Ante esto, la zona de Los Delfines tuvo que ser cubierta por las lanchas que desarrollan su actividad en la playa de Cortadura y en la zona del módulo central de la playa de la Victoria, por lo que el campo de acción se aumentó considerablemente a la hora de estar en permanente vigilancia para cubrir cualquier llamada de auxilio de algún bañista.

Según la representación de los socorristas, este tipo de deficiencias se deben a que "la empresa no facilita los medios económicos para solventar las averías". Ante esto, señalaron como "responsable" de esta situación al Ayuntamiento de Cádiz por "no realizar los controles del cumplimiento del pliego".

En la jornada de ayer, los miembros del comité de empresa del servicio de socorrismo mantuvieron una reunión con el concejal de Seguridad Ciudadana, David Navarro. En dicho encuentro, los trabajadores ofrecieron una serie de propuestas para la mejora de las actuaciones que se desarrollan en las playas.

Así, la principal materia en la que incidieron fue la necesidad de informar a los bañistas sobre los peligros que existen cuando se coloca la bandera roja en las playas. Esto se debe a las complicaciones que se han producido en diversos días del presente verano con las corrientes de retorno y las resacas. "Nosotros tenemos la potestad sólo a título informativo. Pedimos colaboración a los usuarios. Nosotros también ponemos en riesgo nuestras vidas porque nos tenemos que tirar al agua y tenemos que luchar con las corrientes", recalcó un representante de los trabajadores.

De esta manera, la idea de los socorristas es que se puedan desarrollar desde el Consistorio campañas informativas para prevenir riesgos tanto con bandera roja como con bandera amarilla.

Otra de las propuestas que se llevará en futuras reuniones al edil de Medio Ambiente, Manuel González Bauza, es la necesidad de mantener el dispositivo de playas al completo hasta final de septiembre, ya que el número de personas que sigue aprovechando el buen tiempo es importante. De hecho, desde el comité afirmaron que el lunes de la semana pasada al colocarse la bandera roja "se tuvo que llamar corriendo al personal para que estuviera al menos a pie de playa para reforzar, por nuestra iniciativa, las zonas que tenían los puestos de socorrismo cerrados".