La de ayer fue una jornada feliz para los chiclaneros, con la inauguración de importantes obras municipales realizadas a partir de la inundación de 1965.
Los actos comenzaron en la plaza de Castelar, donde el alcalde, Agustín Herrero, recibió al gobernador civil, Santiago Guillén Moreno, y a las demás autoridades. Junto al Iro se había levantado una pequeña tribuna desde la que se procedió a la bendición e inauguración del nuevo puente-pasarela sobre el río. También allí se procedió a imponer la cruz de Beneficencia a la delegada de Auxilio Social, Victoria Baro Sánchez, por su actuación con motivo de la terrible inundación. También fueron condecorados por el mismo motivo tres guardias civiles.
A continuación se procedió a inaugurar varias obras como el mercado de abastos, la pavimentación de numerosas calles, el nuevo depósito de aguas y red general de distribución interior de aguas.
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