El anuncio de la actuación de Rafael el Gallo y su hermano Joselito en la plaza de toros de El Puerto hizo que la afición agotara todas las localidades. Cádiz, como siempre, fue la que más aficionados llevó al coso portuense y los vapores estuvieron todo el día trabajando al completo de pasajeros. Enorme ambiente en la ciudad, con los establecimientos a rebosar.
Los toros fueron de Carmen de Federico, bravos y con poder, a pesar de que fueron quebrantados prontamente por ese plantel de colosos banderilleros y picadores que llevan los hermanos Gallo.
Rafael estuvo bien y trabajando con primor. Satisfizo a los que van a la plaza solo por verlo vestido de torero.
Joselito es un prodigio. Cada día más asombroso. ¡Valiente criatura y qué enormes facultades tiene! Pese a su juventud nadie le aventaja ni le iguala. Obtuvo inmensas y merecidas ovaciones,. De sobresaliente trabajó el portuense Díaz Domínguez.
Comentar
0 Comentarios
Más comentarios