Salvo sorpresa o tragedia, Juan Carlos Jurado será el nuevo presidente del Consejo. Era lógico, teniendo en cuenta que lleva nueve años siendo la mano derecha de Martín José García y que, en la práctica, ciertamente llevaba él muchos de los asuntos de Cobos. Pero ojo, el candidato avisa que no se trata de una continuidad, sino que habla de giro y nueva etapa. De hecho, cuentan que apenas repiten con él tres de los catorce consejeros que tenía Martín José. Eso sí, tres de los pesos pesados que tenía el anterior presidente. Habrá que ver el resto del equipo que ha conformado Jurado, que en las próximas semanas debe hacer público su programa de trabajo. ¿Se atreverá el futuro presidente con la carrera oficial? ¿Afrontará la posibilidad de recomponer una Semana Santa que pide a gritos una nueva estructuración que la haga más 'apetecible'? ¿Variará la forma de funcionar y de concebir este organismo? Muchas esperanzas hay puestas en esta nueva etapa del Consejo de Hermandades. Confiemos en que la permanente esté a la altura.

Lo meditó, lo gestionó, y no ha podido ser. Luis Rivero estaba decidido a afrontar los cambios que necesita la Semana Santa. Y no ha encontrado garantías suficientes para dar finalmente el paso (por ahora). Le honra además la caballerosidad mostrada en todo momento y su disposición a colaborar con Jurado en lo que haga falta. (Como debe ser, en lugar de votar en blanco).

Finalizada la procesión de Soledad de Santo Entierro -que en ocasiones no estuvo a la altura de la categoría ni el carácter de la Dolorosa ni de la cofradía, desgraciadamente- la siguiente fecha extraordinaria, besamano magno al margen, es la del 16 de septiembre. Ese día saldrá a la calle en su paso de palio la Virgen de la Amargura. El itinerario fijado por la hermandad para esta procesión es San Agustín, San Francisco, Cristóbal Colón, Cobos, Catedral, Compañía, Plaza de las Flores, Barrié, Valverde, Beato Diego, Rosario, Columela, San Francisco y San Agustín. Se contemplaron otras opciones de recorrido; pero las limitaciones físicas de las calles y del palio lo hacen imposible.

En base a este recorrido de Amargura, conviene insistir en la idoneidad de un cambio en la carrera oficial que otorgue nuevas perspectivas de la Semana Santa y más libertad de itinerarios a las cofradías a la hora de finalizar ese recorrido común. Demuestra la extraordinaria de la Dolorosa de Humildad que la ciudad es muy amplia -dentro de todos los inconvenientes físicos que tienen las calles estrechas- para el discurrir de las cofradías, y que con una carrera oficial más limitada, corta y espaciosa se permitiría que las cofradías regresaran luego a sus templos por muy variados itinerarios. En el vía crucis diocesano del próximo año también se comprobará.

Ha pedido (o algo más que pedir) el Secretariado de Hermandades que con motivo de la apertura del Año Jubilar Diocesano el próximo 14 de septiembre todos los cofrades acudan a la Catedral y ninguna cofradía programe actos o cultos para ese día. El llamamiento, que está muy bien para dar el alcance que la ocasión requiere, se lo pone sin embargo muy difícil a varias hermandades que ese día tienen cultos y que este año se verían obligados a modificar fechas o celebraciones. Hay quien plantea adelantar o atrasar triduos. Y también quien piensa en celebrar sus cultos ese día antes del pontifical que se celebrará en la Catedral a las ocho de la tarde.

HACE algo más de un siglo paseaba por Cádiz una religiosa, Encarnación Carrasco Tenorio, que había fundado una orden religiosa, el Rebaño de María. Hoy en día, esa orden conmemora el centenario de la que fue su principal referencia, una religiosa que ya es Venerable y que va camino de la santificación. En uno de esos paseos por la ciudad, dicen que era asiduo que la monja visitara al Nazareno del Patio, que ya entonces se veneraba en la iglesia de San Antonio y de la que fue gran devota.

Uno de esos días, acudió la Madre Encarnación angustiada por un problema económico que puso a los pies del Nazareno. Y cuenta el libro sobre la vida de esta religiosa que al terminar sus oraciones ante la imagen de la iglesia de San Antonio "se le acercó un caballero y le entregó un sobre". Resulta que al abrir el sobre en su interior había la misma exacta cantidad (500 pesetas de entonces) que necesitaba la religiosa para hacer frente a unos pagos atrados del alquiler de la casa donde por aquel entonces el Rebaño de María atendía un asilo.

El pasado jueves fue el Nazareno del Patio el que devolvió la visita a la Madre Encarnación. Promovido por la Esclavitud del Santísimo junto con la parroquia de San Antonio y coincidiendo con el centenario del fallecimiento de la fundadora del Rebaño de María que se conmemora este año, se celebró en la casa de las hermanas franciscanas de la calle Costa Rica un acto de adoración al Santísimo y posterior misa, que estuvo presidida por el notable Nazareno, que fue trasladado hasta allí para devolver esa visita que quedó grabada en la vida de Madre Encarnación.

Nazareno y religiosa volvieron así a encontrarse, más de un siglo después y en esta ocasión en casa de la segunda, que posiblemente sigue hoy en pie por esas oraciones que su día elevaba Madre Encarnación en San Antonio. Historias de este Cádiz y sus cofradías.