Bomberos del Consorcio de Bomberos tuvieron que intervenir en la madrugada del jueves en un incendio que se había originado en una finca de la calle San Vicente que estaba okupada por varias personas. A las 4.25 de la madrigada se recibió un aviso en la Sala de Emergencias del 085 del fuego en una vivienda de tres alturas con la posibilidad de que hubiera gente atrapada, ya que los vecinos oyen que hay gritos en el interior.

Los efectivos se trasladaron al lugar y comprobaron que uno de los atrapados se encontraba en la azotea, mientras que el otro estaba en la segunda planta, mientras que el resto de los ocupantes pudieron salir por su propio pie antes de la llegada de los bomberos.

El fuego estaba en un estado de desarrollo en la primera planta y lo primero que hicieron los bomberos fue asegurar una vía de escape para los atrapados, a los que les colocaron una máscara de rescate. Una vez en el exterior, tal y como asegura el Consorcio en un comunicado de prensa, fueron atendidos por los servicios sanitarios del 061.

Posteriormente los efectivos de bomberos pudieron sofocar el incendio que afectaba a toda la vivienda, donde se producen daños en las vigas, en los techos de escayola y también en parte de un tramo de escalera. Para apagar el fuego se tuvieron que emplear 1.500 litros de agua y en el interior había acumulados enseres y basuras. La estructura, que ya estaba en un estado muy precario previamente al incendio, estaba comprometida, por lo que se procedió a su clausura por motivos de seguridad.